De manera independiente, Graciela Márquez, titular de la Secretaría de Economía, dijo que los tomateros mexicanos tienen hasta mañana viernes para demostrar con información al gobierno estadounidense, que no están haciendo dumping.
Desde el 7 de mayo de este año entró en vigor el pago de un arancel provisional de 17.5% para las exportaciones de esta verdura que ingresan al territorio estadounidense.
Se estima que esta medida tendrá un impacto de $350 millones de dólares anuales para esta industria mexicana, por lo cual los productores de tomate se encuentran impulsando un recurso legal para evitar el pago de las cuotas compensatorias.
Por otro lado, el Departamento de Comercio de Estados Unidos tiene hasta el 19 de septiembre próximo para presentar una resolución si continúa con la investigación que está ejecutando sobre presuntas prácticas desleales o dumping.
Márquez agregó que se han tenido posiciones intransigentes y rígidas hacia los productores mexicanos de tomate.
La funcionaria solicitó una llamada para hablar con Wilbur Ross, secretario de Comercio de EUA, para cuestionarle dicha postura y poder continuar con la exportación libre de arancel, ya que el tomate es el tercer principal producto agrícola de exportación de México, luego de la cerveza y el aguacate.
Uno de cada dos tomates en el país vecino es mexicano, en tanto que el valor de las exportaciones ronda los $2,000 millones de dólares, de acuerdo con la Secretaría de Economía.
En otro punto, Márquez Colín reveló que el martes llegó otra investigación sobre láminas de PET, pero es parte de esa compleja relación comercial entre los dos países, aunque ya trabajan en el asunto, pues tienen los instrumentos, el personal y la experiencia para desahogar estos temas. (Con información de Agencias)