Pedro Chavira, presidente de Index Juárez, indicó que las empresas han buscado movilizar los materiales por barco, ante los problemas que han surgido para embarcarlos en avión.
Entre 50 y 60 empresas de la zona fronteriza dependen de la materia prima proveniente de China, por lo que los problemas podrían ser mayores de continuar la emergencia actual, agregó Chavira.
Dijo que por el momento no se tienen afectaciones directas que puedan incidir en paros en la producción, pero si la situación se prolonga por más tiempo, seguramente empezarán a tener problemas para traer los productos.
“En este momento no hemos sufrido paros ni nada que nos esté afectando por el tema, pero si el virus continúa, tarde o temprano nos va a impactar”, afirmó.
A Ciudad Juárez regularmente llegan embarques de insumos para producir componentes electrónicos y abastecen a alrededor del 40 por ciento de la industria.
Luis Carlos Ramírez, presidente de Index en Chihuahua capital, indicó que de momento no hay una compañía que haya reportado efectos o consecuencias graves a raíz del coronavirus chino, pero en algunos casos ha habido una contención en la producción, esto por la cancelación de algunos vuelos.
Precisó que no se tienen registros de paros totales, pero al igual que en la zona de la frontera chihuahuense, varias empresas empezaron a ajustar sus planes para impedir verse afectados por la falta de insumos.
Afectaciones al comercio
Al estar cercados los flujos comerciales por la paranoia ante las 811 muertes por coronavirus en un país con más de mil 400 millones de habitantes, no hay envío de bienes, maquinaria e insumos a México ni se sabe hasta cuándo llegarán, lo cual atrasará la producción y exportación, de acuerdo con la Cámara de Comercio y Tecnología México-China.
El gigante asiático es nuestro segundo socio comercial desde 2003 (55 mil millones de dólares en 2019), es nuestra segunda fuente de importaciones (productos mecánicos y eléctricos, equipos de transporte, equipos ópticos, médicos y relojes, muebles, juguetes y plástico, en su mayoría intermedios para producir y exportar) y nuestro tercer destino de exportaciones (minería, equipo de transporte, productos mecánicos y eléctricos, metales y alimentos), luego de Estados Unidos y Canadá. A su vez México es el segundo socio comercial chino en América Latina.
“Prácticamente cualquier empresa en México que tenga alguna relación comercial con China, entre ellas empresas chinas establecidas aquí, pero también las que les compramos o les vendemos a los chinos, estamos teniendo el problema”, dijo vía telefónica Jorge Morones, vicepresidente del Capítulo Occidente de la Cámara de Comercio y Tecnología México-China, una zona industrial dependiente a la proveeduría china.
“Se tenían varias planeaciones de compras, insumos y productos terminados para consumidor final, y también partes y componentes requeridos para la industria nacional. Pero se juntó el coronavirus con el Año Nuevo Lunar y hoy el escenario es incierto porque no sabemos cuándo los productos o las líneas de fabricación van a regresar al cien por ciento, y por lo tanto no sabemos cuándo los productos van a salir de China ni cuándo llegarán a México”, agregó.
De acuerdo con la Embajada de China, la inversión acumulada en México ha sido de 1,800 millones de dólares con más de 200 empresas chinas asentadas en el país, principalmente de comunicación, infraestructura, manufactura y energía, como Huawei –que canceló el HDC Cloud 2.0 en China por el coronavirus–, ZTE, China Construction America, Nuctech, la estatal Norinco, CNOOC, CPECC, Hainan Airlines, o Hytera.
Además, son más de mil empresas chinas con relación comercial con México sin presencia en el país.
“De por sí no tenemos crecimiento en el país”, dijo Morones. En 2019, hubo una contracción del PIB de 0.1 por ciento. “Primero les va a pegar directamente a ellos y eso lo veremos reflejado en los próximos meses cuando veamos su PIB con relación a las exportaciones. Luego lo vamos a ver nosotros porque, efectivamente, corremos el riesgo de que algunas empresas paren líneas de producción o al menos haya retrasos en maquinaria y equipo que estamos esperando, y eso impacte en la productividad del país”.
De manera temporal, el gigante tecnológico Google cerró todas sus oficinas en China, Hong Kong y Taiwán; y otras grandes como Amazon, Apple, Microsoft, e IKEA también bajaron las cortinas de sus tiendas o están restringiendo los viajes de negocios hacia allá. Walt Disney cerró sus parques temáticos de Shangai y Hong Kong; Toyota Motor restringió los viajes a China y, al igual que Samsung y la cervecera IB Inbev, detuvo operaciones en fábricas en el país asiático, el cual representa el 18 por ciento del PIB mundial.
Xian Zhang, representante del Consejo Chino para la Promoción del Comercio Internacional (CCPIT), coincidió en que esta epidemia va a tener una influencia a las empresas y negocios de China, que crece en promedio entre el 6 y 7 por ciento, por lo que destacó la existencia del Centro de Certificación Comercial para emitir certificados de fuerza mayor para salvaguardar los intereses de aquellas empresas afectadas por la epidemia del coronavirus, incluyendo a las extranjeras en China.
“Será una protección de los riesgos legales para las empresas porque a veces ya tienen un contrato con sus clientes, pero no pueden ofrecer el producto a tiempo debido a que hay un cierre”, expuso.
“Creemos que principalmente son tres efectos. Lo que se afectará más es el sector de servicios porque la gente no puede salir, está en cuarentena en casa, lo que va a dañar restaurantes y compras en tiendas; al sector manufacturero, como la industria del móvil y electrónica, debido al tiempo indefinido para el retorno de la operación; y tercero, el sector comercial debido a posibles recortes o incluso el cierre de líneas aéreas, rutas marítimas y de fronteras por parte de algunos países como resultado del pánico o razones geopolíticas”, dijo a SinEmbargo.
Finalmente, Zhang afirmó que China tiene la capacidad para enfrenta y controlar la epidemia.
*Fuente: http://www.poresto.net/