La renta de naves industriales crecerá 24% este año, principalmente por los nuevos espacios que requerirán las industrias de logística, comercio electrónico y manufacturas, de acuerdo con estimaciones del corredor inmobiliario CBRE.
“Los mercados de la frontera norte de México serán los primeros beneficiados por la búsqueda de nuevos espacios industriales, derivado del desempeño favorable de la economía estadounidense donde la confianza del consumidor está en los niveles más altos de los últimos ocho años y se espera que en 2019 el consumo estadounidense sea superior al de 2018”, explicó Lyman Daniels, presidente de CBRE México.
Detalló que los inversionistas están mostrando interés en realizar expansiones y nuevas aperturas en todos los sectores como el automotriz, electrónico, instrumentos médicos y electrodomésticos, principalmente.
“Las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China contribuye a que empresas chinas volteen a ver a México como opción para instalarse y para beneficiarse del T-MEC en sus exportaciones hacia el mercado estadounidense”, agregó Daniels.
La implementación del programa de la zona libre del norte que ofrece la reducción del IVA a 8%, la disminución al ISR a 20%, el aumento al doble al salario mínimo y la homologación del precio de los energéticos sentará las bases para incrementar la competitividad de las empresas ubicadas en México.
La siguiente región en beneficiarse de la demanda por espacios industriales será el Bajío, donde empresas chinas exploran el mercado.
Por sectores, los que más incrementarán su demanda de espacios industriales son el de distribución y logística con 45% de la ocupación de naves industriales, cuando hace cuatro años participaba con 23%; el automotriz ocupará 25%, 2% más que en 2014; y los productos manufacturados permanecerán con 23% de participación.
Mientras que el comercio electrónico alcanzará 8%. Otros sectores que demandarán más espacios son el aeroespacial, equipo médico y eléctrico-electrónico.
CBRE agregó que en los 90, las empresas buscaron colocarse en países como China dado que los costos de mano de obra eran inferiores; sin embargo, ahora esa tendencia se ha revertido y México se volvió a posicionar con un costo de mano de obra más competitivo.