La décima primera sala regional Metropolitana del Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa (TFJFA) emitió un fallo a favor de Hutchison Port Holdings (HPH), mediante el cual se busca cancelar el proceso de licitación para construir una segunda terminal en el puerto de Lázaro Cárdenas (TECII).
La compañía, sostiene que la sentencia declara la “nulidad lisa y llana de todos los actos” llevados a cabo por la Administración Portuaria Integral de Lázaro Cárdenas (APILC) relacionada con este proyecto.
El pasado 10 de febrero de este año, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) através de la APILC, lanzó a concurso la construcción de una nueva terminal de contendores, el cual a la fecha sigue su curso.
HPH alegó que estas acciones ponían en riesgo el retorno de la inversión que realizó en esa terminal, actualmente bajo su jurisdicción, por lo cual recurrió a la presentación de un recurso legal ante la TFJFA.
La compañía concesionaria de la Terminal Especializada de Contenedores del Puerto de Lázaro Cárdenas (LCT), afirmó que las autoridades no se apegaron al Programa Maestro de Desarrollo del puerto.
“Hicieron modificaciones unilaterales y apartadas del procedimiento legal previsto en el Programa Maestro de Desarrollo en Lázaro Cárdenas, el cual establecía una serie de requisitos económicos y de mercado que deberían de cumplirse previo al lanzamiento de una convocatoria.”
La compañía afirmó que luego del fallo emitido a favor de HPH, tanto la APILC como la SCT tendrán que suspender y dejar sin efecto la actual convocatoria pública APILAC/TEC II/01/11, la cual estuvo viciada desde su origen.
Sin embargo, la SCT decidió recurrir a la revisión y no suspender el actual concurso, para esperar la resolución definitiva de un Tribunal Colegiado.
HPH confía en que la sentencia se sostenga y pueda con ello detenerse el proceso de licitación.“De no suspenderlo, la APILC y la SCT corren un riesgo mayúsculo pues al quedar firme la sentencia, no sólo deberán responder con indemnizaciones conforme a lo avanzado del concurso, sino que están arrastrando a los participantes, que han comprometido esfuerzos y recursos en un proceso viciado, los concursantes están siendo engañados al no ser informados del riesgo” advierte.
