La maquinaria empresarial poco a poco se reactiva tras los dos sismos de 8.2 y de 7.1 grados que afectaron al sur y al centro del país, con saldo preliminar de más de 300 muertos.
Los estados más afectados de esos fenómenos fueron Chiapas, Oaxaca, Puebla, Morelos, el Estado de México y la Ciudad de México, entidades que representan alrededor de 35% del Producto Interno Bruto (PIB) nacional, debido a su actividad comercial, financiera y manufacturera.
Por ejemplo, las industrias más estratégicas en el Estado de México y Puebla son la automotriz, la química-farmacéutica, la textil y la turística.
Según un análisis de la casa de Bolsa GBM, se espera que tras el sismo haya un ligero crecimiento en la construcción, así como en las ramas industriales relacionadas entre ellas el acero.
Asimismo, las ventas minoristas en esa parte del país pueden verse impulsadas en el corto plazo, ya que las personas adquieren agua embotellada, alimentos enlatados, semillas como arroz y frijol, además de otros productos de primera necesidad como cobijas y otros suministros.
Este es un primer balance sobre la dinámica económica tras el sismo.
Las carreteras federales no reportaron afectaciones estructurales a causa del sismo del 19 de septiembre ni del día 7 del mismo mes. No existen reportes de daños en carreteras de las compañías de la muestra analizada por GBM.
Sin embargo, Pinfra dejó de cobrar peaje en algunas de sus autopistas, donde varias vías federales tuvieron daños.
“En el corto plazo no prevemos un efecto sustancial, mientras que en el mediano plazo el tráfico puede mostrar un aumento mínimo y gradual cerca de las ciudades golpeadas por el sismo, a medida que se desarrollen las labores de reconstrucción”, anota el reporte de GBM.
Minería sigue estable
En general, los principales estados mineros de México (Zacatecas, Sonora, Chihuahua y Durango) no sufrieron daños por el sismo del martes pasado. En dichos estados se localiza la mayor parte de los activos de Grupo México, Autlán, Peñoles y Frisco.
Si bien en la Ciudad de México y en los estados de Puebla, Oaxaca, Hidalgo y Guerrero hay una pequeña concentración de las operaciones mineras, hasta el momento las compañías no han hecho anuncios públicos sobre cambios en la producción, lo que significa que las operaciones se desarrollan normalmente.
Alimentos y bebidas, posibles beneficiados
El alza en la demanda de agua embotellada y alimentos enlatados puede traducirse en un beneficio para empresas como Herdez, Cultiba —que entre sus filiales tiene a Grupo Embotellador Bret— y Femsa, dice la casa de Bolsa.
Sin embargo, según GBM, “debemos tener en cuenta que la mayoría de las compañías en las muestras está cooperando y ayudando a las zonas afectadas (ya sea con productos o contribuciones económicas), por lo que el efecto neto deberá de ser neutral en términos generales”.
Construcción revivirá
La falta de actividad de la industria de la construcción en el corto plazo se compensará cuando comiencen los esfuerzos de reedificación, dice la casa de Bolsa.
“Se espera una mayor demanda de cemento, acero y vidrio plano cuando empiecen las labores de rehabilitación y ayuda, particularmente en el segmento de construcción de los edificios, carreteras, viviendas y puentes”.