El estudio ‘Impacto económico de la industria del café en Panamá’, elaborado por la consultora Indesa, revela que en 2015 la industria del café aportó $212.2 millones o 0.4% al Producto Interno Bruto (PIB) del país.
El análisis también concluyó que la integración de toda la cadena productiva del grano tiene gran potencial para dinamizar la economía, a pesar de la baja producción.
El informe presentado ayer por el economista y presidente de la consultora, Felipe Chapman, indica que los $212.2 millones son el resultado de la cadena de valor de la industria cafetera, cultivo y procesamiento durante 2015.
En esta línea, el análisis apunta a que la mayor oportunidad se encuentra en la exportación de café tostado, debido a que genera mayor valor agregado y los precios por tonelada internacional son tres veces mayores a los precios del café sin tostar, toda vez que el café en grano ha ido perdiendo participación.
De 2012 a 2017, las importaciones y exportaciones del café en grano cayeron 10%, mientras que del tostado crecieron 5%.
‘Las perspectivas de los exportadores de café tostado, al generar un mayor valor agregado al grano de café, son más positivas que las de los exportadores de café en grano sin tostar, dado que las tasas de crecimiento de las exportaciones y los precios por tonelada son superiores’, indica Indesa.
En este sentido, añade que la integración de toda la cadena productiva en Panamá (cultivo y procesado) tiene un potencial de exportación en un mercado en crecimiento y con precios superiores a la exportación del grano solo, de acuerdo con Indesa.
‘Este análisis arroja resultados que demuestran el alto potencial que tiene la industria de generar mayor valor agregado en el resto de la economía, a través de encadenamientos productivos, si se fomentase su producción de manera integral’, indica.
Cifras del estudio también revelan que en América Latina solo cinco países tienen exportaciones de café tostado superiores a $5 millones anuales (Colombia, México, Brasil, Honduras y Panamá) y en conjunto representan el 1% de las exportaciones de café tostado a nivel mundial.
‘Es notable que Panamá sea el quinto país que más exporta café tostado en dólares, a pesar de ser uno de los países con más baja producción de café en grano de la región.’ señaló Chapman.
De hecho, añadió el economista, Panamá ocupa la segunda posición entre países de la región con la mayor proporción de su café total exportado dedicado a la exportación de café tostado (21.7%).
En otras palabras, a diferencia de otros países de la región, el café cultivado en Panamá tiene un elevado potencial para ser exportado como café tostado o ya elaborado, en lugar de café sin tostar, dijo Chapman.
Considera que a pesar de la baja producción de café en grano, la integración de toda la cadena productiva en Panamá (cultivo y procesado) tiene un potencial de exportación en un mercado en crecimiento y con precios superiores a la exportación de café en grano.
EXPORTACIÓN DE CAFÉ EN GRANO
En 2015, el valor FOB de las exportaciones panameñas de café en grano sumó $10,011 millones, representando un incremento de 24.0% con relación al año anterior. Se trata de una tendencia que se ha mantenido en los últimos años.
En 2016 el valor FOB de las exportaciones de café aumentó 77.2%; es decir, unos $17,736 millones, y en 2017 subió 0.7%, hasta $17,868 millones.
No obstante, en 2015 la producción disminuyó 2.5% (26,690 quintales), en 2016 subió 63.7% (hasta 43,693 quintales) y en 2017 cayó 5.9%; es decir a 41,107 quintales.
Asimismo, las hectáreas cultivadas también han venido decreciendo. En 2017 el hectareaje sembrado de café disminuyó a 19,240 hectáreas (-3.0%); en 2016 cayó a 19,825 (-0.3%) y en 2015 a 19,886 (-1.8%), según Chapmam.
El análisis destaca el potencial de la industria del café para impulsar el crecimiento económico del país, a través del análisis de su efecto multiplicador. ‘Un sector no tiene vida económica aislada, el análisis del multiplicador permite determinar los enlaces de una determinada industria con el resto de la economía, ya sea como generador de ingresos o como demandante de bienes y servicios en el resto de la misma’, puntualizó Chapman.
El impacto multiplicador de la industria del café sobre el valor agregado de la economía panameña se estimó en $ 212.2 millones.
El mayor impacto de esta industria es generado a través del consumo privado de los empleados en la cadena productiva del café ($81.9 millones).
Aunque actualmente este impacto económico del café (cosecha y procesamiento) es inferior al de otras industrias agrícolas, su multiplicador de valor agregado es el más elevado ($1.62), según el estudio de Indesa.
Cifras del sistema de información del mercado de café de Centroamérica, del Área de Inteligencia comercial de CentralAmericaData en 2017 ubicaron a Panamá en el sexto lugar de los principales países exportadores de café de la región.
El año pasado, el principal exportador de café en Centroamérica fue Honduras, con $1,321 millones, seguido de Guatemala, con $749 millones; Nicaragua, con $513 millones; Costa Rica, con $308 millones; El Salvador, con $121 millones; y Panamá, con $24 millones.
En 2017, el 30% del valor exportado desde la región tuvo como destino Estados Unidos (30%), Bélgica (16%), Alemania (15%), Japón (6%) e Italia (5%).
De enero a marzo de 2017, el valor FOB de las exportaciones y el peso del café tuvo una variación negativa en comparación con igual periodo de 2016, de 14.9% y 35.0%, respectivamente, según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Censo que publica la Contraloría General.