La Alianza Langostinera del Sur (SAA) ha solicitado al Gobierno de Estados Unidos la aplicación de aranceles adicionales a todas las importaciones de productos acuícolas provenientes de China.
El pedido fue realizado a través de una carta enviada a la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos (USTR), en la que la alianza también manifiesta su apoyo a la solicitud de un senador de Louisiana para que el langostino y el cangrejo de río sean incluidos en una lista de importaciones de China que se gravarían con un impuesto adicional del 25 %.
La organización recuerda que previo a esta solicitud, la USTR había determinado que las acciones del Gobierno de China con respecto a la transferencia de tecnología, la propiedad intelectual y la innovación son irrazonables y discriminatorias, porque restringen o suponen una carga para el comercio de EE.UU. Por este motivo, propuso aplicar un arancel adicional del 25 % sobre ciertas importaciones chinas, pero la lista incial no incluía a los productos del mar.
No obstante, la USTR ha invitado a las partes interesadas a enviar comentarios sobre qué productos deberían estar sujetos en última instancia a cualquier acción según la Sección 301 de la Ley de Comercio.
En su carta la USTR, la SSA señala que el Ministerio de Comercio de los EE.UU. ya había determinado formalmente que los productores y exportadores de langostino chinos han recibido subsidios compensatorios, e incluso apoyo a través de las políticas industriales del Gobierno de China.
Además, la SSA observa que la adopción generalizada de la acuicultura en todo el mundo significa que hay muchas otras fuentes de productos marinos fuera de China, de modo que cualquier tarifa aplicada a los productos del mar chinos tendría un impacto adverso limitado sobre los consumidores estadounidenses.
Y lo que es importante aún, la SSA argumenta que incluir los productos acuícolas chinos en cualquier medida correctiva de la Sección 301 beneficiaría a los consumidores estadounidenses, al limitar el consumo de productos contaminados.
Al respecto, la organización destaca que recientes estudios académicos confirman que el uso de antibióticos en la acuicultura china sigue siendo desenfrenado y no está regulado. De hecho, afirma que China tiene el peor registro de cualquier país con respecto a la detección de residuos de medicamentos veterinarios en sus envíos de productos del mar a Estados Unidos.
La SSA pone de relieve que según datos de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de EE.UU., en el periodo de 16 años comprendido entre 2002 y 2017, China representó más del 42 % de todas las partidas de productos del mar que fueron rechazados por motivos relacionados con residuos de medicamentos veterinarios.
La proporción de estos rechazos ha seguido en aumento: en 2017, los productos chinos representaron el 57 % del total las partidas de productos del mar importados que fueron rechazadas por la FDA por razones relacionadas con los antibióticos, y en los primeros cuatro meses de este año, el porcentaje llegó al 91 %.
Por lo anterior, la alianza afirma que la inclusión de los productos producidos de la acuicultura china en cualquier recurso de la Sección 301 ayudará a la USTR contrarrestar el apoyo del Gobierno de China para impulsar las exportaciones acuícolas y, al mismo tiempo, beneficiará a los consumidores estadounidenses al reducir el consumo de productos contaminados en el mercado estadounidense.
El año pasado, EE.UU. importó productos del mar de China por un total de USD 2.600 millones, monto del que USD 1.000 millones correspondieron a productos de la acuicultura.