La inflación general de México alcanzó un nivel de 4.6% en mayo del presente año, tres veces más elevada que el promedio registrado en los países que conforman la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), la cual resultó de 1.5%.
De acuerdo con el reporte mensual del organismo internacional, con ese nivel de precios México se ubica como el segundo país con la mayor inflación de los 34 países de la OCDE, solo por debajo de Turquía, que al quinto mes del año registró un nivel de 6.5%.
Aunque en el país comenzó un proceso de relajamiento en la evolución de ese indicador y se espera que en julio se presente con mayor fuerza, su actual nivel aún está lejos del objetivo del Banco de México, que es de 3%, con +/-1%.
Los países con los menores niveles de inflación general fueron Portugal, Canadá, Francia, Chile, Dinamarca, Polonia, Nueva Zelanda, Irlanda e Israel, por debajo de 1%.
Por su parte, Suiza, Suecia, Grecia y Japón reportaron variaciones negativas en sus respectivos datos de inflación a mayo.
Del conjunto de países que forman el también llamado Club de ricos, México es la nación que reportó los niveles más altos de este indicador macroeconómico en su componente de alimentos.
Según la OCDE, el país latinoamericano tuvo una inflación de alimentos de 8.6% en mayo de 2013, es decir, 4.5 veces superior al promedio de los que conforman el organismo, donde fue de 1.9%.
En ese componente México superó a países como Finlandia y Turquía, que reportaron niveles de 7.5% y 7.1%, respectivamente.
Entre los productos que presionaron la inflación de alimentos fueron el pollo, huevo y tomate verde, principalmente, debido al brote de gripe aviar en algunos estados del país y casos relacionados con el clima.
Respecto a la inflación de los bienes y servicios relacionados con la energía, México tuvo un nivel de 7.4%, cuando el promedio de la OCDE fue de 0.5%.
En el indicador subyacente, considerado mejor parámetro para medir la inflación, pues se eliminan factores estacionales y de alta volatilidad, la OCDE informó que el país reportó un nivel de 3.2%.
Sin embargo, en ese componente también superó al promedio de los países que conforman el organismo internacional, pues en el periodo en cuestión registró una inflación subyacente de 1.5%.
El investigador del Tecnológico de Monterrey, José Luis de la Cruz, dijo que la inflación en los países desarrollados está controlada por su alto nivel de productividad, lo cual les permite compensar las presiones inflacionarias que se vean alrededor del mundo. “Su estructura económica es más competitiva, tienen menos monopolios, oligopolios y los intermediarios en la economía son menos, eso les permite una menor inflación. Parte del problema de México es la falta de productividad, la dependencia que tenemos respecto al exterior para la compra de ciertos bienes”, mencionó.
El pasado lunes, el Banco de México informó que los resultados de la Encuesta sobre las expectativas de los especialistas en economía del sector privado de junio ven mejores perspectivas para el comportamiento de los precios, pues prevén que la inflación cierre en 3.79%.
Si bien desde hace varios años la inflación de México ha concluido dentro del objetivo que tiene el Banco de México, Bank of America Merrill Lynch advirtió que esto podría no ocurrir en 2014 en caso de que se apruebe una reforma fiscal integral.
En un análisis, el banco expuso que una reforma que modifique la tasa del Impuesto al valor Agregado empujará a la inflación a un nivel cercano a 5%, un nivel que no se observa desde 2008.
