Con el objetivo de implementar una disposición que beneficie al consumidor final, la Secretaría de Economía (SE) informó que analiza los planteamientos y solicitudes de diferentes empresas de la industria juguetera del país para valorar la conveniencia o no de aumentar de 15 a 35 por ciento los aranceles a la importación de juguetes.
De esta manera, la dependencia encabezada por Bruno Ferrari convocó a las empresas del sector a presentar argumentos, documentos y demás información para definir una resolución conforme a Derecho y con ello acabar con los jaloneos registrados entre fabricantes e importadores.
Y lo que sucede, es que mientras fabricantes de juguetes aseguran que el mercado mexicano ha sido invadido literalmente por artículos chinos, empresas importadoras sostienen que elevar el arancel a la importación resultaría un duro golpe para los consumidores al privarles la posibilidad de adquirir de productos de buena calidad a un precio justo.
Por ello, la SE pidió a los interesados presentar el mayor monto de información posible con el objetivo de tomar una decisión que beneficie a los consumidores, sin atentar en contra de la productividad de alguno de los actores del mercado.
“La SE analiza los planteamientos y solicitudes de la industria, pero las decisiones de política se toman en función del mayor beneficio para las empresas y consumidores en general”, aseguró a través de un estudio.
Actualmente la industria del juguete comprende a alrededor de 845 establecimientos productores, los cuales generan cerca de 12 mil empleos directos. La mayoría de los establecimientos son micro y pequeños (ocho por ciento de la producción); en tanto que las medianas y grandes empresas generan 91 por ciento de la producción total.
Seis estado concentran 98 por ciento de la producción total de juguetes: Baja California (26.5 por ciento); el Estado de México (21); el Distrito Federal (14.5 por ciento); Nuevo León (14.3 por ciento); Chihuahua (14.1) y Jalisco (ocho por ciento).
El volumen de comercio exterior, que en promedio anual era de mil millones de dólares en el periodo 2000-2005, aumentó a tres mil 300 millones de dólares entre 2006 y 2009. En 2010 resultó de dos mil 600 millones.
La producción ha mostrado un desempeño favorable en los últimos tres años, revirtiendo la tendencia negativa que había mostrado en el periodo de 2005-2007. En 2010, el valor de la producción creció 10.6 por ciento respecto al año 2009, al sumar 505 millones de dólares.
Cabe recordar que en 2005, como parte de la política para promover la reconversión y la competitividad de la industria del juguete, se estableció un cupo de importación dirigido de manera general a los fabricantes de juguetes, quienes pueden importar mercancías para complementar su oferta productiva y competir en el mercado interno.
