El secretario mexicano de Relaciones Exteriores dijo a Notimex que transmitirá este mensaje al nuevo presidente de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, quien toma posesión del cargo este jueves en una ceremonia especial en el capitalino Estadio Nacional.
Meade Kuribreña asiste con la representación del presidente de México, Enrique Peña Nieto, a la ceremonia de cambio de mando en el país centroamericano de manos de la mandataria saliente Laura Chinchilla al nuevo gobernante Luis Guillermo Solís.
“Venimos, ciertamente, con la representación del presidente Peña Nieto, a expresar la voluntad política, el deseo de México, de construir con Costa Rica una relación cercana, una relación estratégica”, expresó el canciller mexicano.
“Costa Rica es para México un socio comercial de gran importancia —el más importante, en Centroamérica—, un destino de inversión relevante”, puntualizó Meade.
El diálogo entre ambas naciones latinoamericanas se manifiesta, entre otros escenarios, en bloques y organizaciones regionales en los que participan, expresó el funcionario mexicano.
Se trata de entidades tales como la Comunidad de Estados Latinoamericanas y Caribeños (Celac) y la Asociación de Estados del Caribe (AEC), señaló Meade.
Además, México es país observador en el Sistema de la Integración Centroamericana (Sica) y Costa Rica —que ahora desempeña la presidencia anual de la Celac— aspira a incorporarse a la Alianza del Pacífico, bloque latinoamericano del que México es parte, agregó.
El vínculo entre los dos países también presenta el componente de seguridad regional, aseguró el titular de Relaciones Exteriores de México.
Además, “México es observador del Sistema de Integración Centroamericana, (y) Costa Rica aspira a ser parte de la Alianza del Pacífico, aspira a integrarse a la OCDE”, dijo en alusión a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos.
El secretario general de la OCDE es el excanciller mexicano José Angel Gurría, quien el año pasado llevó a cabo una visita a Costa Rica.
“Eso hace que entre Costa Rica y México haya, siempre, una oportunidad (…) muy amplia de diálogo, en una cantidad de temas y de foros”, manifestó Meade.
“Al mismo tiempo, Costa Rica es para México un socio comercial de gran importancia –el más importante en Centroamérica-, un destino de inversión relevante”, planteó el canciller.
“Por todo ello, consideramos que habiendo ya manifestado los dos mandatarios la voluntad política de seguir estrechando vínculos, podremos hacerlo muy bien, en estos años que le quedan a la administración (2012-2018) del presidente Peña Nieto”, expresó.
Se trata de años “que habrán de ser concurrentes con la gestión (2014-2018) del presidente Luis Guillermo Solís”, precisó.
Por otra parte, “México es amigo de la Estrategia de Seguridad de Centroamérica”, subrayó.
México “ha venido fortaleciendo sus capacidades institucionales, de inteligencia, de diálogo con la región, y ha expresado a Costa Rica, y con Costa Rica, la voluntad de trabajar juntos para enfrentar esos retos”, puntualizó Meade.
Se trata de “retos en los que México lleva trabajando mucho tiempo, y en donde ha venido, poco a poco, acreditando resultados importantes, tanto en la disminución de la violencia, en la generación de condiciones de paz y en el desmantelamiento de muchas de estas bandas delincuenciales”, mencionó.
La toma de posesión de Solís en reemplazo de Laura Chinchilla se da en el marco del segundo de dos hechos electorales sin precedentes en Costa Rica.
Chinchilla es la primera mujer que ejerce la Presidencia de país centroamericano, mientras que Solís se convertirá en el primer presidente postulado al cargo por un partido no tradicional.
