Con este tratado, los productos mexicanos podrán tener acceso a seis mercados con los que no tenían ningún tratado comercial previo (Australia, Brunei, Malasia, Nueva Zelanda, Singapur y Vietnam) y que representan 155 millones potenciales.
El tratado entrará en vigor dos años después de su firma si los 12 países que lo conforman lo ratifican, o en su defecto cuando los seis países que suponen el 85% del Producto Interior Bruto (PIB) de TPP lo hagan.
El acuerdo viene a ser un ‘parteaguas’ en la historia del comercio internacional, como lo define la Secretaría de Economía mexicana y para México supondrá su consolidación como un importante centro para la producción y exportación de bienes y servicios.