Este nuevo tratado comercial será el treceavo en la lista de acuerdos comerciales bajo el formato de Tratado de Libre Comercio (TLC), ya que existen otros tipos de acuerdos comerciales tales como los de preferencias arancelarias que se tienen en vigor con países de América Latina (ALADI) o el Sistema Generalizado de Preferencias arancelarias (SGP).
Con el llamado CP-TPP (Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico), por sus siglas en inglés, que comprende cuatro regiones y 10 países además de México -después de la salida de los Estados Unidos- se sumarán seis nuevos países a nuestra red de tratados de libre comercio: Australia, Brunei, Malasia, Nueva Zelandia, Singapur y Vietnam, más los cuatro restantes con los que ya teníamos un TLC en vigor como son Canadá, Chile, Japón y Perú.
Este bloque de países tiene un peso específico importante en el contexto mundial ya que concentran el 6.8% de la población, 13.5% del PIB, casi el 15% del comercio y cerca del 13% de la captación de la inversión extranjera directa (IED), según datos del FMI, UNCTAD y la OMC.
¿Qué se espera para nuestro sector de comercio exterior? Seis nuevos mercados a los que los productos mexicanos podrán llegar en condiciones de tratamiento arancelario preferencial y la profundización (consolidación) de cuatro más ya existentes. México es el tercer país exportador entre las 11 economías que conforman este bloque y este acuerdo le abre la posibilidad a muchas empresas mexicanas para salir al mundo y a otras tantas para hacer coinversiones con empresas de esas latitudes con miras a producir en México para exportar al TLCAN. Una vez cumplida la condición para la entrada en vigor que marca 60 días a partir de la aprobación de al menos seis países, se espera que suceda el 30 de diciembre de 2018.