Entre la Alianza del Pacífico, que aspira a desarrollar su actividad en la región de Asia, y Japón, el mayor inversor de Asia en América Latina, existe un efecto sinérgico económico sin precedentes”, indicó Abe, en entrevista con el diario El Mercurio.
La relación entre Japón y la Alianza del Pacífico (AP), no solamente es complementaria en la que se suple la falta de bienes y capitales, sino que posibilita más progresos en el campo de la formación de recursos humanos y la búsqueda conjunta de nuevos mercados, dijo.
Señaló que, como primer observador de la AP, “Japón desarrollará la cooperación con la Alianza, proponiendo temas concretos tales como perfeccionamiento de conectividad mediante el avance de infraestructuras”.
Asimismo, “mejoramiento del ambiente del comercio exterior e inversiones, apoyo a las pequeñas u medianas empresas y ejecución de la cooperación triangular dirigida a terceros países en los campos de prevención de desastres, entre otros”, refirió.
En su visita oficial a Chile, que se extenderá hasta mañana jueves, el primer ministro japonés se entrevistará con la presidenta Michelle Bachelet, asistirá a un foro comercial chileno-japonés y a la inauguración de una mina de cobre en el norte de Chile.