Dicho en otras palabras tales empresas tienen poder sustancial en los mercados relevantes. Es decir, los usuarios de sus servicios están sujetos a las condiciones de los dos concesionarios y éstos podrían estar obteniendo beneficios extraordinarios con tarifas elevadas.
La Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece), que preside Jana Palacios, declara la falta de competencia en 20 rutas de transporte ferroviario de carga de productos químicos y petroquímicos con origen en el sur de Veracruz, en donde sólo operan dos empresas ferroviarias: Kansas y Grupo México, con sus subsidiarias, Ferrosur y Ferromex.
La declaratoria de la Cofece es muy importante porque con ella, la Agencia Reguladora de Transporte Ferroviario, que encabeza Alejandro Álvarez Reyes, podría, si así lo considera, regular las tarifas en el servicio que prestan ambas empresas ferroviaria o establecer derechos de paso, lo que implicaría que los actuales concesionarios permitan el acceso de terceros.
Vale la pena señalar que a poco más de un año de la privatización de los ferrocarriles en México, en virtud de la modificación a la Constitución que la permitió en 1995, en noviembre de 1996, la empresa Transportes Ferroviarios de México (TFM) (actualmente Kansas City de México) obtuvo una concesión por 50 años, renovable bajo ciertas condiciones, por 50 años más, para proporcionar servicios de transporte de carga a lo largo del Ferrocarril del Noreste.
En su título de concesión ambas ferroviarias aceptaron una cláusula sobre tarifas que a la letra dice:
Conforme a la concesión y a la Ley Reglamentaria del Servicio Ferroviario, KCSM (y Grupo México y sus subsidiarias) puede establecer libremente sus tarifas a menos que la Comisión Federal de Competencia Económica determine que no existe competencia efectiva, tomando en consideración rutas ferroviarias alternas y otros modos de transporte.
Si la Comisión Federal de Competencia Económica determina que no existe competencia en el sistema ferroviario, la SCT establecerá la base para las tarifas de KCSM.
Bueno, pues justamente eso es lo que encontró la Cofece.
Determinó la falta de competencia efectiva en 20 rutas del servicio público de transporte ferroviario de carga de cloro, óxido de etileno, amoniaco anhidro y sosa cáustica, con origen en la zona sur del estado de Veracruz, todas ellas operadas por Kansas City Southern de México (Kansas) o por Grupo México, a través de Ferrosur y Ferromex.
¿Por qué la región puede considerarse como el corazón de la producción de químicos y petroquímicos de México?
Porque el estado de Veracruz representa 11% de la producción de la industria química nacional y 48% de la industria petroquímica mexicana. Ahí se ubican cuatro de los siete complejos petroquímicos de Pemex, tres de ellos en el municipio de Coatzacoalcos. El cloro, óxido de etileno, amoniaco anhidro y la sosa cáustica son insumos para más de 50% de los procesos de las industrias farmacéutica, de fertilizantes, procesamiento de alimentos, limpieza y cuidado personal, automotriz, construcción, entre muchas otras del sector manufacturero.
Veremos si la autoridad reguladora ferroviaria “se echa el trompo a la uña” de aplicar medidas procompetencia. Al tiempo.
*Fuente: https://www.transporte.mx/