En el primer caso, el sector naval de amplia tradición fue uno de los puntos clave para que hoy en día el país nórdico sea un constructor de plataformas de perforación para mar y sean pioneros en la investigación para construir ductos submarinos para llevar el gas y el crudo producido en el Mar del Norte a tierra, dijo Rolf Hestenes, ex director de la Federación de Industrias Noruegas.
La industria manufacturera naval de este país adquirió las bases de las plataformas marinas petroleras en Singapur y después en los astilleros de Noruega se construyó toda la infraestructura de detalle.
En el caso de Brasil, el Consejo Nacional de Política Energética es una de las responsables del establecimiento de las políticas nacionales, mientras que la Agencia Nacional del Petróleo es quien decide la cantidad de contenido nacional para los bloques que se licitarán.
Fuentes cercanas a la industria señalaron que si estas políticas son muy restrictivas, las empresas podrán ver afectados sus planes de inversión y derrama económica.
En el caso mexicano, será la misma Pemex quien decida la cantidad de contenido nacional en las compras que realice.
La paraestatal planea gastar este año 3 mil 998 millones de pesos en compras de Gobierno a Pymes, sin embargo, los grandes proyectos se los llevan empresas de mayor tamaño, las cuales a su vez, subcontratan a las más pequeñas.
“La mayoría de las proveedurías vienen a través de la subcontratación de las grandes empresas. En el mediano y largo plazo es probable que se aumente la participación de los proveedores nacionales si hay un programa atractivo para el proceso de exploración y explotación y sobre todo de transformación del petróleo”, dijo Gilberto Ortiz, vicepresidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación.
La gama de proveedores Pymes, mencionó, van desde los que venden servicios y productos de industria médica, hasta los que surten productos para perforación de pozos.
Dijo que los industriales están inquietos porque no ha fluido la inversión pública, lo que provoca un efecto de angustia en las empresas que ven que no hay toda la dinámica que se requiere.
