La empresa de soluciones de control de temperatura para el transporte refrigerado, Thermo King enumero las barreras a las que se enfrentan las flotas en su transición a la tecnología de cero emisiones.
Thermo King señaló que a pesar de los avances, la infraestructura de carga limitada, la fiabilidad desconocida del componente, el rango limitado, un mayor costo inicial, un mayor peso del vehículo y la duración esperada de la batería, aún siguen siendo barreras para que la industria vea la adopción total de los vehículos eléctricos de batería (BEV) y sus beneficios.
Respecto a la infraestructura de carga limitada, la empresa explicó que la gran mayoría de las flotas de transportes refrigerados en México planea instalar su propia infraestructura, en lugar de depender de sitios de terceros, lo cual significa que la responsabilidad de la implementación de transporte sostenible recae en la empresa de transporte.
«La barrera más grande que enfrentan las empresas es el costo de tecnología en transporte de carga. Esto hace que los incentivos y reembolsos estatales y federales disponibles sean fundamentales», explicó.
En tanto, hablando del rango limitado, Thermo King indicó que una de las aprensiones que surgen dentro de la industria del transporte es no saber si un vehículo llegará a una estación de carga antes de quedarse sin energía.
«La gama de BEV mejorará gradualmente a medida que mejore la densidad de energía de la batería. Mientras tanto, las flotas pueden mitigar la ansiedad por el alcance mediante funciones avanzadas, como la predicción del alcance en tiempo real, la planificación avanzada de rutas y la estimación del consumo de energía de los accesorios», advirtió.
La empresa expuso que la tecnología de pilas de combustible está progresando, sin embargo tanto la durabilidad como el costo del sistema, la disponibilidad de combustible y los precios del combustible de hidrógeno son los principales obstáculos que deben abordarse.
Asimismo, señaló que es probable que la tecnología de pilas de combustible sea la más adecuada para aplicaciones de camiones regionales o de larga distancia, pero otra de las preocupaciones es conocer cuán pesado podría ser un camión de celda de combustible, potencialmente 5,000 libras más que un camión diesel.
En última instancia, la economía impulsará el uso de pilas de combustible en el transporte por carretera. La disponibilidad y el precio del combustible jugarán un papel importante sobre la inversión en tecnología y la adopción de la flota, así como si se materializa o no una economía de hidrógeno en los próximos años.
«Los vehículos de servicio liviano y mediano están en medio de la transición a la tecnología de cero emisiones, y los camiones de servicio pesado seguirán. Pero la adopción total no será posible hasta que se aborden los obstáculos en torno a la infraestructura de carga y el alcance limitado», indicó.
Fuente:
Ana Laura Huerta-https://www.tyt.com.mx/nota/las-barreras-de-las-flotas-en-su-transicion-a-la-tecnologia-cero-emisiones