Los industriales del acero de México y Canadá exigieron a sus respectivos gobiernos pactar “un comercio libre, abierto y justo del acero” como parte de la modernización del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y se proceda a eliminar los aranceles estadounidenses impuestos por supuestos motivos de seguridad nacional.
La Cámara Nacional de la Industria del Hierro y del Acero (Canacero) y la Asociación Canadiense de Productores de Acero (CSPA) demandaron a los gobiernos de México, Canadá y Estados Unidos abordar la eliminación de todas las restricciones comerciales del acero y el aluminio implementados bajo los términos de la Sección 232 de la Ley de Expansión Comercial de Estados Unidos.
Máximo Vedoya, presidente de la Canacero, afirmó que “un TLCAN con aranceles al acero y aluminio contradice sustancialmente el propósito principal de un TLC”.
“La renegociación del TLCAN representa una oportunidad para eliminar las barreras comerciales en el acero y el aluminio dentro de la región para fortalecer a las cadenas de suministro en energía, industrial, construcción y manufactura de América del Norte”, ezpuso Joseph Galimberti, Presidente de CSPA.
A través de un comunicado, la industria siderúrgica que enfrenta aranceles de 25% en sus exportaciones a territorio estadounidense reconoció el trabajo de los respectivos gobiernos en la renegociación del TLCAN, pero mientras avanzan los trabajos es urgente resolver decisivamente el problema de la sección 232. Desde que el TLCAN se hizo efectivo, el comercio de productos siderúrgicos entre los países miembros aumentó más del doble, alcanzando 117.2 por ciento.
Actualmente, la gran mayoría de las exportaciones de acero en América del Norte se hacen dentro de la región —97% de las exportaciones de acero canadiense son a EU y a México, 90 % de las exportaciones de acero de Estados Unidos se realizan a Canadá y a México, y 76% de las exportaciones de acero mexicano son a Canadá y a Estados Unidos.
En total, 88% de todas las exportaciones de acero en América del Norte se realizan dentro de la región, haciendo que el comercio libre, abierto y justo dentro de América del Norte sea fundamental para el éxito de los productores y consumidores de acero en el TLCAN.
Los organismos industriales de México y Canadá informaron que están comprometidos en defender activamente los mercados norteamericanos de las importaciones globales de acero en condiciones desleales.
“Los productores de acero en Canadá, Estados Unidos y México han sufrido como resultado del comercio desleal del acero derivado del problema de la sobrecapacidad mundial”, dijo Máximo Vedoya.
