El pasado miércoles 8 de mayo un reconocido noticiario radiofónico matutino local en la ciudad y puerto de Manzanillo Colima se dió a la tarea de realizar una investigación relacionada al acoso sexual en el puerto interior, pues se suponía que el problema era fuerte, que una de las principales fuentes de inconformidades por parte de las mujeres provenía de quienes laboran o laboraban en su interior, las llamadas a cabina no se hicieron esperar, la sopresa fue cuando entre las diversas llamadas que se recibieron en el espacio del noticiero se hizo referencia nuevamente a los funcionarios de la Aduana de Manzanillo.
Anteriormente en este medio nos dimos a la tarea de realizar una investigación con respecto al acoso laboral que se ejerce dentro del departamento de Rayos Gamma perteneciente a la Subadministración de Operación Aduanera lidereada por el Lic. Eduardo Camacho Hernández, en aquella ocasión el efecto de dicho artículo fue un endurecimiento del acoso laboral para los mismos empleados, logrando con ello silenciar a los denunciantes.
Ahora el caso es distinto en tipo pero no en importancia, sale a la luz el problema del acoso sexual al interior del puerto y grave es que sea al interior de las propias oficinas de la Aduana de Manzanillo, si bien la operación portuaria aduanera provoca que la atención se vuelque sobre los asuntos legales, aduaneros o fiscales de importancia así como la operación, no debieran dejarse de lado los asuntos de Recursos Humanos, el control del ambiente laboral tiene igual importancia o incluso mayor que la misma operación, sin un clima laboral favorable la productividad de cualquier empresa decae, el ritmo de la Aduana de Manzanillo es ya rápido, inteso, sin descanso, el trabajo sale en forma y tiempo en la mayoría de los casos, pueden imaginar cual sería dicho ritmo si el personal trabajara a gusto, pueden imaginar empleadas caminando tranquilamente por la plataforma de reconocimiento aduanero sin sentirse observadas o incluso dentro de las mismas oficinas.
No es en definitiva un tema exclusivo de dicha aduana, ni sorprende incluso que en este país se den casos como este a diario en muchas empresas, lo que sorprende es la falta de pronunciamientos y declaraciones por parte de las autoridades competentes, tal vez con la intención de que con el tiempo bajen los comentarios y los reclamos y esto quede simplemente como un artículo más.
Es muy importante denunciar ante el ministerio público este tipo de prácticas, no importa si es tu subadministrador, tu jefe de departamento o tu compañero de trabajo, el acoso sexual se castiga y tienes derecho a trabajar sin presiones ni comentarios misoginos, señas o gestos que te hagan sentir incomoda en tu lugar de trabajo, cometarios de doble sentido, cometarios directos, miradas, acercamientos y en el peor de los casos propuestas condicionadas son solo algunas de las formas de acosar sexualmente a una persona, deja el miedo de lado y denuncia, si trabajas en la aduana es un tanto más dificil generar el despido debido a la falta de presupuesto para liquidaciones, ademas de la agravante del despido con una denuncia de acoso sexual previa, asesorate y defiendete.
MEXICOXPORT / PIXAN
