El viceministro de Comercio Exterior de Perú, Carlos Posada destacó que la puesta en marcha del acuerdo era esperada por este sector, pues no solo favorecerá la venta de madera cruda o en tronco o tabla, sino también la diversificación de productos derivados como muebles procesados.
“Los beneficios serán altos, pues estamos ante un mercado de 120 millones de personas con alta capacidad de consumo que limitan con Estados Unidos, con lo que las oportunidades se multiplican”, declaró a la Agencia Andina.
Resaltó que la puesta en marcha del acuerdo con México implicará, en Loreto, una mayor demanda de mano de obra por la madera que se solicitará, lo que ayudará a incrementar la inclusión social.
Igualmente, dijo que otros productos típicos como el camu camu (fruta) y las semillas orgánicas, los peces de la selva congelados o procesados tendrán oportunidades importantes.
Otro rubro que se verá favorecido será el de los textiles. “El tratado implica una mejor competitividad”, manifestó.
El viceministro llegó hoy a Iquitos, capital de Loreto, para difundir los alcances del tratado con México, en una actividad organizada por el gobierno regional y la Comisión de Promoción del Perú para la Exportación y Turismo (Promperú).
El Acuerdo de Integración Comercial Perú–México fue suscrito el 6 de abril de 2011 y reemplaza al Acuerdo de Complementación Económica (ACE) N° 8, firmado por ambos países el 25 de marzo de 1987.
Posteriormente, mediante Decreto de la Cámara de Senadores del Congreso de México, publicado el 9 de enero 2012, se aprobó el acuerdo.
Entre los objetivos figura estimular la expansión y diversificación del comercio entre ambos países, eliminar las barreras al comercio y facilitar la circulación de mercancías y servicios, y promover condiciones de competencia leal en el comercio.
