Ciudad de México, 19 de febrero (SinEmbargo).– Los miembros de la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) consideran que el balance de riesgos para el crecimiento de México ha observado “cierto deterioro” y destacaron que la mayoría de los analistas ha revisado moderadamente a la baja las previsiones sobre la recuperación de la actividad económica en México para 2016 y 2017.
De acuerdo con las minutas del banco central, los principales riesgos para la expansión del país es una recuperación de la economía estadounidense que demore más de lo previsto, así como caídas adicionales en los precios del petróleo en un entorno de mayor debilidad en la economía global.
Uno de los integrantes mencionó también la posibilidad de que la incertidumbre en los mercados financieros internacionales se prolongue, lo que podría afectar “de manera más severa” las condiciones externas para las economías emergentes, así como la insuficiente fortaleza de los principales determinantes del consumo privado, los bajos niveles de confianza empresarial, la debilidad de la construcción no residencial y el riesgo de nuevos descensos de la producción de petróleo.
Por ahora, destacó la mayoría, la evolución de la economía mexicana sigue mostrando “un crecimiento sustentado” en el comportamiento favorable del consumo privado. Sin embargo, las exportaciones manufactureras “permanecieron estancadas, a la vez que la inversión fija bruta redujo su dinamismo”.
Uno de los miembros consideró que durante este año y el siguiente se espera que las exportaciones tengan una mayor contribución al crecimiento de la actividad económica en México.
Ello, agregó, ante la expectativa de un repunte en la producción industrial estadounidense, combinado con la depreciación del peso frente al dólar, lo que permitiría una recuperación de las exportaciones mexicanas de manufacturas.
Lo anterior, en conjunto con la expansión de la demanda interna, permitiría un fortalecimiento gradual del ritmo de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) en los próximos dos años, si bien a un ritmo menor que lo anticipado.
PRECIOS DE BIENES DURABLES AL ALZA
En la reunión de enero, Banxico mantuvo las tasas de interés de referencia en 3.25 por ciento, luego de elevarlas 0.25 puntos en diciembre pasado, en línea con la Reserva Federal. Sin embargo, ante el entorno de alta volatilidad e incremento en los riesgos, durante una junta extraordinaria decidió elevarlas a 3.75 por ciento.
Los precios de las mercancías durables han aumentado de manera pausada y gradual, pero hasta ahora no se han observado efectos de segundo orden en los precios de bienes y servicios no comerciables derivados del fortalecimiento del dólar, expuso Banxico.
La mayoría de los miembros de la Junta apuntó que la inflación no subyacente aumentó “más de lo esperado” durante las primeras semanas de 2016, como consecuencia de alzas temporales en los precios de algunos productos agropecuarios.
Un integrante puntualizó que ese ligero repunte es excepcional, por lo que es indispensable redoblar esfuerzos para asegurar la consolidación de la inflación al objetivo de 3 por ciento.
CAÍDA DEL PETRÓLEO SEGUIRÁ
Banxico anticipa que los precios del petróleo se mantedrán bajos por un período considerable, si se toma en cuenta la actual sobre oferta de crudo, los elevados niveles de inventarios y la casi agotada capacidad de almacenamiento adicional.
“Es previsible que persista el significativo desbalance estructural entre oferta y demanda de crudo, por lo que se anticipa que los precios del petróleo se mantengan bajos por un periodo considerable”, aseguró en sus minutas.
Un integrante mencionó que en algunos países exportadores de petróleo la caída en el precio de esta materia prima ha tenido implicaciones macroeconómicas derivadas de una pérdida de riqueza importante. Ello, a través de un impacto negativo sobre las finanzas de las compañías petroleras, lo que a su vez ha afectado, en algunos casos, la producción industrial y las bolsas de valores en estos países.
Los menores precios del petróleo se han convertido en una fuente de retroalimentación de la volatilidad financiera internacional, sentenció.
