Desde horas en la mañana del martes hasta tarde en la noche, la Guardia Costera de los EE.UU. estuvo trabajando para evitar que una embarcación de Government Cut. se hundiera en aguas de la Florida.
La barcaza de 270 pies fue remolcado por un remolcador justo antes de las 9 am del martes, cuando los tripulantes del barco notificaron a la Guardia Costera de los EE.UU. que tenían problemas de combustible y quedaron incapacitados y a la deriva. Iban arrastrando la embarcación y su carga de contenedores de transporte desde Haití a Miami pero la fuerza de las olas pudo más.
Una compañía privada se dirigió hacia el area para ayudar con el remolque del buque y desafiaron las altas y fuertes olas de dos metros de altura para colocar bombas a bordo de la barcaza para poder sacar el agua que ocasionaba que la embarcación se hundiera rápidamente. No obstante, era más agua la que entraba que la que salía del buque.
“Queríamos mantener el buque a flote, pero el agua entra más rápido de lo que sale”, comentó un comandante de la Guardia Costera.
“Hemos tratado de salvar esta barcaza. Estamos tratando de proteger la propiedad, pero hasta ahora no hemos tenido éxito”, dijo el comandante Chris Glander.
Al hundirse la embarcación se amenaza con lanzar 40 contenedores de carga a bordo en el mar. Pero la Guardia Costera dice que “si la embarcación se hunde, no va a plantear una amenaza ambiental. Básicamente, no queremos que se hunda en una zona donde podría haber arrecife o una gran cantidad de vida silvestre”, dijo el suboficial Nick Ameen.
Nadie resultó herido ya que ya no había nadie abordo de la embarcación y la tripulación ayudando con el remolque está a salvo. Este buque es sólo una base flotante, no hay combustible a bordo, y todos los contenedores están vacíos.
