Los precios del petróleo terminaron a la baja en Nueva York: el barril abandonó 1.73 a 80.79 dólares, tras predicciones sobre una vuelta a temperaturas normales en Estados Unidos y de que China anunciara medidas para frenar un recalentamiento de su economía.
En el New York Mercantile Exchange (Nymex), el barril de West Texas Intermediate (WTI) para entrega en febrero terminó en 80.79 dólares, en descenso de 1.73 dólares en relación al cierre del lunes.
En el InterContinentalExchange de Londres, el barril de Brent del mar del Norte para entrega en febrero descendió 1.67 dólares a 79.30 dólares.
Dos factores incidieron en el retroceso del precio del petróleo.
Por una parte, los inversores estaban preocupados por las medidas tomadas por el banco central de China para frenar un recalentamiento de su economía: el incremento de las tasas de reservas obligatorias para los grandes bancos y el alza de las tasas de interés sobre los bonos del Tesoro a un año.
China es considerado el motor de la recuperación de la demanda mundial de petróleo, como lo recordó una vez más la agencia estadounidense para la Energía (EIA) en su informe mensual.
En el 2010 como en el 2011, la EIA cuenta con un crecimiento de más de 400,000 barriles por día del consumo chino de petróleo, contra 220,000 barriles de Estados Unidos para el año en curso.
El lunes, el mercado no había logrado capitalizar en bonos las cifras de importación chinas.
“Evidentemente, cuando el mercado no logra progresar en un marco de actualidad alcista, significa que estas noticias ya habían sido tenidas en cuenta en los precios”, estimó Phil Flynn, de PFGBest Research.
Por otra parte, una vuelta a temperaturas normales en el noreste de Estados Unidos, principal región del país en el consumo de combustible para la calefacción, calmó la ansiedad de los inversores.
“Pasamos mucho tiempo estas últimas semanas comprando petróleo con anticipación al tiempo frío. Pero una vez que esto pasó, debemos recordar que las reservas son superiores al promedio de este período del año en combustible para calefacción”, afirmó Flynn.
