El ministerio de Comercio chino desaprobó la llamada alianza P3, que pretendían conformar la danesa Maersk Line, la francesa CMA CGM y la italiana Mediterranean Shipping, con lo que el mercado espera un aumento de la competencia que podría afectar la dinámica del sistema en general de transporte marítimo de cargas, según informaron sitios especializados latinoamericanos, como Mundo Marítimo, el Instituto Boliviano de Comercio Exterior y la Terminal Puerto Arica.
La decisión ministerio de Comercio chino, que tras siete meses de revisión consideró que la alianza está reñida con la legislación de fusiones de China, sorprendió a las tres navieras, ya que la unión, planteada como de índole operacional y no comercial, había sido aprobada por la Comisión Marítima Federal de Estados Unidos y por la Comisión Europea.
El CEO de Maersk, Niels Andersen, quien se expresó también en nombre de sus socios, resaltó la sorpresa ante la decisión, ya que las tres empresas “hicieron todos los esfuerzos por cumplir con las inquietudes de los reguladores chinos”.
Además de inesperada, la resolución de la autoridad comercial china abrió un camino de incertidumbres, a tal punto que tanto Maersk como CMA CGM informaron en sendos comunicados que el colapso de los planes conjuntos no afectarán los resultados de la compañías de este año y que mantendrán sus posiciones en el mercado.
La firma danesa dejó entrever además la posibilidad de buscar nuevas alianzas y fórmulas de cooperación entre los socios, pese a que la resolución del gobierno chino implica la prohibición de cualquier red de servicios conjunto.
El acuerdo para aliarse, anunciado hace un año, causando conmoción en el negocio portuario, buscaca operar de forma única las líneas y los barcos de las tres grandes empresas, aunque manteniendo separada la comercialización, con el fin de reducir costos.
Si bien las compañías insitieron en que cada una comercializaría por separado sus servicios con sus precios, la unión llevaba
implícito concentrar el tráfico en determinadas rutas, puertos y en grandes buques portacontenedores, especialmente para unir Europa con Asia y el Pacífico con el Atlántico.
Maersk Line, considerada la empresa más grande de transporte marítimo en contenedores, emplea a 25.000 trabajadores, opera 600 buques.
Mediterranean Shipping es la segunda empresa en el mundo del sector, con 459 navíos, y CMA CGM está en tercer lugar, al operar 200 rutas entre 400 puertos de 150 países.
