martes, noviembre 5, 2024
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Claroscuros de la base exportadora del noreste

Con exportaciones superiores a los 116,000 millones de dólares el año pasado (28.8% del total nacional), la región noreste de México (Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas) posee la base exportadora más importante del país.

Claroscuros de la base exportadora del noreste

Los datos provienen del Banco de Información Electrónica (BIE) del Inegi y no coinciden con los totales nacionales por restricciones de confidencialidad o disponibilidad, pero cubren un universo muy amplio del total. Cada habitante de la zona exporta tres veces más que el mexicano promedio.

Mediante la utilización de modelos económicos multisectoriales, analizamos la relevancia de ese mercado para la economía del noreste: 43.4% del valor de su producción, 35.2 de su Producto Interno Bruto (PIB) y 33.6 del ingreso disponible para el gasto de sus hogares.

Regresando a las cifras del BIE, entre el 2007 y el 2019 las exportaciones del noreste crecieron a tasas anuales de 5.7%, elevando su participación en los totales de México en 3.7 puntos porcentuales.

Por su dinamismo, destacan las ventas al exterior de la fabricación de equipo de transporte, las cuales se incrementaron en 43,324 millones de dólares en ese lapso, pasando de 17,821 millones en el 2007 a 58,145 el año pasado, con lo cual su aporte a las ventas internacionales de la región brincó de 22 a 51 por ciento.

Si agregamos las ventas foráneas de otras tres actividades económicas (fabricación de maquinaria y equipo; industria electrónica, así como aparatos, equipos y accesorios para la generación de energía eléctrica), llegamos a un índice de concentración de casi cuatro quintas partes del total (78.2 por ciento). En el 2007, este porcentaje era de apenas 41.2.

Así pues, el costo del acelerado crecimiento en las exportaciones ha sido una menor diversificación sectorial de las mismas, pues durante esos años se registraron caídas absolutas y/o relativas en ramas de actividad antaño más importantes (equipo de cómputo, química, metálicas básicas, productos metálicos, productos textiles y prendas de vestir).

Esta característica hace a la región muy vulnerable a los ciclos económicos de un grupo reducido de sectores y muy especialmente a las vicisitudes de la industria automotriz. Esta fragilidad es especialmente preocupante en el caso del estado de Coahuila, pues 68.4% de sus exportaciones provienen de este sector.

De hecho, esta entidad de la frontera norte de México es la más articulada al mercado externo, el cual origina 45.6% del valor de su producción, 35.8% de su PIB y 34.1% del ingreso disponible de sus hogares (estos valores para Nuevo León son 29.1%, 23.2% y 22.1%, respectivamente, y para Tamaulipas 35.1%, 26.6% y 24.8 por ciento).

La depresión económica desencadenada por la pandemia y sus efectos galvanizadores sobre la globalización, la percepción del cambio climático y la aceleración del cambio tecnológico, tendrán importantes repercusiones sobre el monto y la estructura sectorial y territorial de los mercados globales de bienes y servicios. Veamos algunos de sus posibles impactos sobre la producción del noreste de México en el corto plazo.

La Organización Mundial de Comercio (OMC) estima que el valor del comercio internacional en el 2020 caerá entre 13 y 32 por ciento. Ubiquémonos en el punto medio bajo de este escenario: ¿Cuál sería el impacto en el valor de la producción bruta regional si las exportaciones se contraen 20% este año?

La caída sería de 8.7%, siendo Coahuila la entidad más afectada (-9.1%), seguida por Tamaulipas (-7%) y Nuevo León (-5.8 por ciento). Es preciso aclarar que sólo estamos cuantificando los efectos de variaciones en las exportaciones, es decir, no estamos modelando las repercusiones de cambios en el resto de los componentes de la demanda agregada (consumo privado, inversión fija y gasto gubernamental).

Consideremos ahora los impactos en la producción bruta de la economía del noreste ante choques externos en sectores específicos: 1) las exportaciones de la industria automotriz caen 30% (pronóstico de la AMIA); 2) las del resto del sector maquinaria y equipo (dentro del cual se clasifica la industria electrónica) 20% (se aplica a este sector la tasa basada en el rango de proyección de la OMC); 3) las del sector primario y la industria alimentaria aumentan 10% (El Economista reportó un aumento de 4.2% durante el primer semestre del año, suponemos una tasa mayor como resultado de la recuperación gradual de las actividades económicas, la alta demanda y los mayores precios de estos productos) y 4) la combinación de los tres escenarios anteriores.

Escenario 1. Noreste (-3.6%): Coahuila (-7%); Nuevo León (-1.7%); Tamaulipas (-1.6 por ciento). Escenario 2. Noreste (-2.7%): Coahuila (-1.8%); Nuevo León (-2%); Tamaulipas (-2.7 por ciento). Escenario 3. Noreste (.014%): Coahuila (.01%); Nuevo León (.012%); Tamaulipas (.012 por ciento). Escenario combinado (1+2+3): Noreste (-6.2%); Coahuila (-8.7%); Nuevo León (-3.6%); Tamaulipas (-4.2 por ciento).

La economía de Coahuila es la más afectada por la contracción de la demanda internacional en el mercado automotriz y por la combinación de los tres escenarios. Por su parte, derivado de la mayor presencia de la industria maquiladora, Tamaulipas es más vulnerable a la reducción en las ventas foráneas de productos electrónicos.

Nuevo León y Tamaulipas obtienen beneficios marginales del aumento en las exportaciones de productos del sector primario y de la industria alimentaria, lo anterior en razón de la reducida participación de estas actividades en sus respectivas economías.

Conservar y diversificar la base exportadora de las economías de esta región será una tarea compleja. Es indispensable avanzar en la competitividad de las exportaciones a través de las innovaciones productivas y, simultáneamente, en su diversificación sectorial.

Se debe impulsar una política industrial que parta de una visión estratégica de los cambios tecnológicos en curso, especialmente en los campos de la inteligencia artificial, la energía (fuentes confiables, económicas y “descarbonizadas”), así como las innovaciones cualitativas en curso en materia de logística y movilidad de bienes y personas.

Nuestras principales limitaciones para emprender con éxito estas tareas han sido diagnósticas por Santiago Levy: La disfuncionalidad de nuestro sistema fiscal, de las instituciones y regulaciones en materia de seguridad social y la endeble aplicación del estado de derecho (Financial Times, 14 de julio del 2020).

*Investigadores nacionales del Conacyt, adscritos al Centro de Investigaciones Socioeconómicas de la Universidad Autónoma de Coahuila.

Fuente:

Alejandro Dávila y Miriam Valdés-https://www.eleconomista.com.mx/opinion/Claroscuros-de-la-base-exportadora-del-noreste-20200823-0041.html

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