Dicha demanda mercantil fue presentada por Daniel Gutiérrez Topete, ex distribuidor de Hyundai y director general de Vitesse Financing.
Cabe recordar que el 29 de septiembre de 2009, por requerimiento de Hyundai, Vitesse cambió su objeto social a “la compra, venta, importación, exportación, distribución, comercialización y otorgamiento en arrendamiento puro o financiero de todo tipo de vehículos de autotransporte”.
Comenzó así la relación de suministro, venta y distribución de la marca coreana en territorio nacional. Sin embargo, a partir de diciembre de 2013 la armadora comenzó con el incumplimiento de la relación comercial, al tiempo que comenzó a firmar con diversas empresas afiliadas para continuar con el suministro de partes, automotores y refacciones de Hyundai en México, asegura la demanda interpuesta por la firma mexicana.
Vitesse Financing afirma que ha acarreado penalizaciones e incumplimiento de contratos, además de que estima pérdidas superiores a los 263 millones 170 mil pesos, por la falta de suministro e incumplimiento de contratos de 2013 a 2015.
En ese sentido, el pasado 12 de junio de 2015, el Juez Civil de Primera Instancia en Tecate, Baja California, José Manuel Castro Valenzuela, ordenó congelar el 50 por ciento de las cuentas de Hyundai en Banamex y cualquier otro banco nacional; y a la matriz coreana y a las filiales mexicanas informarle de todas sus importaciones al país desde 2009.
