En este periodo ha logrado mantener desde 1999 el segundo lugar nacional en atracción de IED, detrás del Distrito Federal, y convertirse en líder de manufactura de valor agregado en sectores como biotecnología, nanotecnología, tecnologías de la información y autopartes, destacó Rolando Zubirán Robert.
El subsecretario de Inversión Extranjera y Comercio Internacional de la Secretaría de Desarrollo Económico del Estado recordó que en el arranque del TLCAN Nuevo León exportaba productos más orientados a la maquila de materiales baratos.
“La moraleja te dice que el TLCAN no ha sido como mucha gente dice, que nos han explotado, ha sido benéfico, sin embargo, las ventajas competitivas y comparativas que tiene México han tomado tiempo en desarrollarse”, explicó Zubirán en entrevista.
“Al principio no podíamos mandar material desarrollado, material de punta, hoy en día ya estamos especializados, ya no hacemos materiales ni procesos tan baratos y nuestros salarios ya no son tan baratos”.
Nuevo León fue el primer estado en ratificar y pronunciarse en favor del TLCAN y ha sido de los más beneficiados en la atracción de inversión, destacó el funcionario.
“Somos el estado con el menor índice de pobreza, el estado que más patentes genera año con año, el estado con la población de 18 años que más educación profesional tiene, el estado con el mayor número de estudiantes con doctorado que hay”.
La apertura comercial dio al sector exportador la oportunidad de integrar en sus procesos insumos y componentes importados que empezaron a bajar sus aranceles.
“EL TLCAN cambió el panorama a toda empresa involucrada en el comercio exterior, sobre todo a aquellas que no podían ser competitivas porque les faltaban algunos insumos que anteriormente se importaban con aranceles más altos, lo cual nos sacaba de competencia.
“Este acuerdo nos hizo más competitivos, pero ahí es donde viene la segunda parte, como todo tratado, hay ganadores y perdedores”, expuso por separado Juan Manuel Quiroga Lam, director del Consejo Mexicano de Comercio Exterior Noreste (Comce).
Aquellas industrias que estuvieron vinculadas a empresas globales como la automotriz, electrónica, aeroespacial y de telecomunicaciones, fueron las ganadoras, refirió en entrevista.
Mientras que las perdedoras fueron aquellas tradicionales con procesos de bajo valor agregado, que no se actualizaron.
El vaso se puede ver medio lleno, aseveró el director del Comce, porque todavía queda pendiente una política industrial para encadenar a diversos sectores productivos y una mayor democratización de las exportaciones que están concentradas en pocas empresas y sectores.
