La exportación de bienes desde América Latina creció 13.2 por ciento en el primer semestre de 2017, principalmente por la recuperación de los precios de los productos básicos, como alimentos, petróleo y minerales, pero el desempeño de México tuvo un peso determinante, pues representa casi 40 por ciento de los envíos de la región al exterior.
De acuerdo con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), “después de cuatro años consecutivos de contracción, la incipiente recuperación iniciada en 2016 se consolidó y las exportaciones de América Latina y el Caribe retomaron la senda de crecimiento en el primer semestre de 2017”.
Si bien el valor de las exportaciones creció a doble dígito en la primera mitad del año, el volumen de los productos sólo aumentó tres por ciento; sin embargo fue impulsado por México, el cual registró un incremento de 10.2 por ciento ante la desaceleración o caída en los envíos de los demás países de la región.
- El Dato: Si bien el valor de las exportaciones creció a doble dígito en la primera mitad del año, el volumen de los productos sólo se incrementó 3.0 por ciento.
El organismo internacional destacó que “el desempeño de México tuvo un peso determinante, no solamente por su tamaño, ya que en 2015 sumó cerca de un 40 por ciento de las exportaciones de América Latina y el Caribe, sino también por una dinámica competitiva que contrasta fuertemente con la de las economías sudamericanas”.
En el reporte “Monitor de comercio e integración 2017. Más allá de la recuperación, la competencia por los mercados en la era digital”, el BID resaltó que en la primera mitad de este año los precios de productos básicos han subido 9.8 por ciento, a diferencia del 2016, cuando se contrajeron 5.3 por ciento, lo cual ha ayudado a la región.
Sin embargo, comentó que dicho crecimiento no es generalizado en todos los países latinos y “se basa en gran medida en el repunte de los precios, que empiezan a mostrar signos de desaceleración, y en aumentos de los volúmenes de baja intensidad y alta concentración geográfica”.
El documento señala que en los últimos años se observa más la fuerte disparidad que hay en la región, pues el crecimiento promedio de las exportaciones entre 2010 y 2015, la cual es de 2.5 por ciento, se debió principalmente al “desempeño excepcional” de las ventas al exterior de México, las cuales en dicho periodo aumentaron 30.4 por ciento, a diferencia de la contracción de los demás países, de 11.4 por ciento.
“La única economía de América Latina y el Caribe que aumentó su competitividad entre 2010 y 2015 fue la de México, donde este efecto contribuyó con siete puntos porcentuales al crecimiento de las exportaciones”.
El organismo internacional también destacó que los países que basan sus exportaciones en productos agropecuarios, minerales o combustible fueron los de mayores pérdidas en ese periodo, como Brasil, pues “el desempeño desfavorable estuvo dominado por los efectos relacionados con la estructura y dinámica de la demanda externa”.
Si bien la tasa de crecimiento de las exportaciones de Latinoamérica fue positiva, luego de la recaída comercial de la poscrisis, ésta fue menor que la global, lo que hizo que perdiera cuota en el mercado a nivel mundial.
Esta situación revela que, con excepción de México, la diferencia entre Latinoamérica y el mundo no sólo se debe a la especialización de sus productos incluidos en su canasta núcleo (que se obtiene excluyendo los rubros o productos con una proporción menor a uno por ciento en las exportaciones), sino también por una menor capacidad de competir en los mercados externos.
