La industria cárnica malagueña está de enhorabuena. De las ocho empresas autorizadas por México para poder exportar carne de porcino a este país, las únicas dos que hay de Andalucía son malagueñas: Famadesa y Faccsa. El resto son de Cataluña (tres), Castilla-La Mancha (dos) y Castilla-León (una). El recorrido hasta obtener este permiso no ha sido fácil, desde el momento en que las dos cárnicas malagueñas han tenido que pasar un examen bastante riguroso de las propias autoridades mexicanas. Lo importante de esta autorización es que le abre la puerta a un mercado de más de 130 millones de habitantes. El órgano mexicano encargado de dar este permiso es la Secretaria de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA) y el Servicio de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA).
Hasta ahora solo se podía exportar a México carne de porcino curada, con tratamiento térmico o preservada (jamones, paletas y embutidos perfectamente etiquetados).
Lo importante de esta autorización, que tiene vigencia hasta el 31 de diciembre de 2018, es que abre a las empresas españolas un mercado de 130 millones de habitantes como es México.
En el caso de la provincia, Faccsa que ya tenía ya autorización para exportar embutidos a México, amplía ahora las posibilidades de crecer en este país incorporando a su oferta toda las carnes de cerdo que produce. Faccsa procesa 25.000 cerdos por semana (1.300.000 en 2015), lo que supone más de 100 millones de kilos de productos anuales. El 35 por ciento de sus exportaciones tiene como destino mercados no comunitarios. La compañía ha conseguido que sus exportaciones representen ya el 50 por ciento de su facturación. La firma cerró 2015 con 200 millones, de los cuales 100 corresponden al mercado extranjero.
Faccsa Prolongo está llevando a cabo mejoras en sus instalaciones con el fin de aumentar la producción de los actuales 25.000 cerdos por semana a 36.000, confiada en que la búsqueda de nuevos mercados como el mexicano van a permitirle seguir creciendo en ventas fuera de nuestras fronteras.
Competir con calidad
En el caso de Famadesa, empresa que dirige el empresario malagueño Federico Beltrán, la autorización es una gran conquista para la firma. «Estamos muy contentos. Somos más de mil mataderos en toda España y únicamente ocho hemos logrado esta autorización», ha señalado Beltrán, que ha declarado que tiene muy claro que es un mercado en el que hay que competir con calidad y precios.
Para Beltrán, Famadesa se esfuerza de manera constante y a diario para contar con todas las auditorias de calidad posibles y de mayor prestigio, por lo que eso es una gran ventaja a la hora de conseguir este tipo de permisos por parte de las autoridades de los diferentes países.
Según Beltrán, su empresa no exportaba al continente americano, por lo que esta puede ser una forma de ir encontrando nuevos nichos de mercado en esta zona de mundo.
Con más de 40 años de trayectoria, Famadesa es matadero y fabrica de productos derivados del cerdo y jamones. El grupo empresarial abarca además otras ocho sociedades dedicadas a la cría y engorde de cerdos y elaboración de piensos, al sector agroalimentario y al transporte de mercancías que generan unos 1.000 empleos directos. La firma produce 5.000 toneladas de embutidos y más de 200.000 piezas de jamón curado cada año. Tiene capacidad para realizar hasta 1.100.000 sacrificios de porcino al año. Alrededor del 40% de su facturación anual global, que ronda los 200 millones, sólo la cárnica, -otros 100 corresponde al resto de las empresas del grupo empresarial-, procede de la exportación.
