Al menos un 30 por ciento de los ganaderos colimenses se ven afectados por la ley estadounidense que impuso un arancel de 60 dólares a la exportación de becerros mexicanos desde hace más de un año.
Así lo informó el presidente de la Unión Ganadera Regional (UGR), Francisco Silva Montes, quien manifestó que esto repercute en que haya sobre oferta de becerros en el país y que no sea atractivo exportar.
Manifestó que además de esta situación que va en detrimento de la actividad ganadera en la entidad y a nivel nacional, las fronteras siguen abiertas a la importación de ganado de otros lugares y eso golpea todavía más la oferta nacional que se pudiera tener, señalando que por esto y por la misma crisis financiera nacional, se tuvo en 2009 una caída del 15 por ciento en los precios del ganado, cuando los insumos para el productor se han disparado desde un 50 hasta un 300 por ciento.
“Hay una controversia que se interpuso por parte de la Confederación Nacional Ganadera y la Organización Mundial de Comercio, en contra de esas prácticas que están fuera del Tratado de Libre Comercio (TLC), que son monopólicas y que afectan el comercio mundial, por eso está en el panel de Washington y esperamos una respuesta en los meses de julio y agosto, que pudiera ser favorable”.
Silva Montes dijo que mientras eso sucede, el sector ganadero en la entidad debe permanecer soportando la importación del ganado que realmente le pegan a un sector que apenas busca consolidarse, además de que la exportación ha caído fácilmente en un 95 por ciento, toda vez que antes a nivel nacional se exportaban entre 600 y 700 mil becerros y ahora la cantidad apenas alcanza los cinco mil animales, por ello insistió en que se tiene una sobreoferta de 700 mil becerros.
