“Todos los collares que diseño, tienen un significado, una historia”.
Etherea es una de las 10 empresas del estado con las que está asociado Novica. Una empresa cuya filosofía es utilizar productos naturales con elementos que no afecten al planeta, además de promover el trabajo digno.
El sitio en línea reúne artesanos de todo el mundo para comercializar sus productos, y es aquí donde Alejandra Torres Muñoz encontró un escaparate internacional.
Además de este cliente, Alejandra ha diseñado regalos corporativos para General Motors y SRG Globlal.
Durante un tiempo envió sus productos a Francia, donde vendió en dos ocasiones, pero por situaciones diplomáticas dejó de hacerlo. (Caso Florence Cassez).
Algunas famosas que han utilizado sus productos son Tania Rendón (Chica E 2013) y la actriz Vanessa Restrepo.
Diseño del proyecto
La inquietud de que sus productos llevaran su marca, fue lo que motivó a Alejandra Torres Muñoz a convertirse en diseñadora de joyería.
A la par de estudiar una maestría, en el año 2009 decidió incubar su plan de negocio en el Tecnológico de Monterrey Irapuato. “Ya no quería hacer nada más collares”.
La preparación del plan le llevó un año, parte de su formación consistió en tomar cursos de finanzas, mercadotecnia y administración.
La inversión inicial de su negocio fue de 110 mil pesos, y parte del dinero fue inversión propia y otra con apoyo del Gobierno del estado. Fue así como dio inicio su empresa.
“El reto más difícil fue dejar mi carrera para ser emprendedora, la transición de darme cuenta de que soy diseñadora”.
Alianza con Novica
“Me costó un poco de trabajo porque son muchos requisitos, fue a través de COFOCE (Coordinadora de Fomento al Comercio Exterior) que se generó el vínculo”.
Dentro de los requisitos que le pidió el cliente, se encontraba el que elaborara productos de calidad cumpliendo lineamientos ecológicos.
En cuestión de piedras, Alejandra explica que no aceptan coral porque está en peligro de extinción, ni tampoco ciertas maderas; es decir, deben usarse productos que no afecten al planeta.
La negociación tardó medio año, inicialmente envió un muestrario con los diseños de propuesta, detallando todas las especificaciones de peso, medida y características.
Este muestrario Novica lo analiza, realiza pruebas de calidad, propone modificaciones en caso de ser necesarias y finalmente selecciona las piezas que formarán parte del catálogo virtual.
La alianza ha durado cuatro años y para Etherea estas ventas representan el 30 por ciento de su producción que se vende en el extranjero.
Etherea, la historia detrás de…
El nombre nació de su gusto por la cultura griega.
“El éter es el quinto elemento, tiene brillo y luz propia, es el único elemento que podía dar vida y transmitir emociones. En cierta forma, así somos las mujeres”.
El estilo en su diseño es conservador y elegante, su mercado son mujeres de nivel medio alto a las que les gusta verse bien.
La producción mensual es de 200 piezas, de las cuales el 70 por ciento se queda en territorio nacional, con distribución en Toluca, México, Irapuato y León. La exportación hacia Estados Unidos es a través de Novica.
Los diseños los vende en línea desde su página y una parte de la comercialización la realiza con mujeres que venden los productos de manera directa.
Los materiales que utiliza son plata, chapa de oro, perla natural, turquesa, ónix ágata, aguamarina y lapislázuli.
Los proveedores con los que trabaja son nacionales, con certificación y que además exporten. Por ejemplo, la plata la adquiere de un taller en Taxco, la chapa de oro es de Guadalajara, y las piedras son de Monterrey y la Ciudad de México.
Las colecciones cambian cada tres meses, pero los diseños trata de hacerlos atemporales para que siempre se puedan usar. Sólo con Novica produce en serie: Para ellos elabora 13 piezas por modelo, el resto de su diseños se compone de creaciones únicas.
“Me gusta hacer arte, que los collares transmitan y que cuando te los pongas, te sientas bien”.
Sus colecciones incluyen collares, pulseras y aretes. Su última colección se inspiró en el Conde de Montecristo. La próxima colección, que lanzará en marzo de 2016, la realizará con base en un libro que está leyendo de nombre “Delirium”, cuyo tema central son los sentimientos. A lo largo de su trayectoria ha diseñado 10 colecciones.
Producción
Toda la bisutería es elaborada a mano. Al inicio de su carrera, Alejandra Torres elaboraba sus diseños de forma empírica y posteriormente tomó un curso con Raúl Ibarra, en el que aprendió técnicas de engarzado.
Cuando se trata de diseñar y crear las colecciones, Alejandra es la encargada. Al iniciar su proyecto, todas las piezas se elaboraban en su taller, pero con el paso de los años y al crecer la responsabilidad, pensó en un modelo diferente de producción.
Actualmente colabora con cuatro mujeres que tienen su taller en casa. Este modelo está pensado para que las mujeres no descuiden a su familia.
“Es una forma de generar su ingreso, sentir que están aportando, es conveniente que las empresas tengan ese tipo de oportunidades”.
Lo que aprendió en la ingeniería industrial, lo lleva a su taller para sus procesos; una vez a la semana se reúne con sus colaboradoras para entregar el material y las especificaciones de la producción.
Revisión de calidad
Cuando la producción está lista, Alejandra es la responsable de la revisión de calidad final.
Para Novica se debe llenar una hoja de verificación (‘check list’), en ella se evalúan los acabados, el material y que las piedras estén en buen estado; esta revisión se lleva una hora por pieza.
Los productos se envían a Guadalajara, al centro de distribución de Nóvica, de donde se envía a Estados Unidos.
La presentación final de la pieza lleva el sello de National Geographic, con una tarjeta que cuenta la historia de la pieza.
Prueba y error
En el año 2004, en Toluca, comenzaba el auge de la elaboración de bisutería. Fue en ese momento cuando una amiga la animó para iniciar en el negocio.
Su inversión inicial fue de 4 mil pesos, con los que adquirió producto ya elaborado, dedicándose a venderlo en diferentes espacios: a la salida de la escuela de sus hijos, con ex compañeras de trabajo y en el gimnasio.
Al ver que la mercancía se vendía de forma rápida, decidió tomar este camino. Se asoció para vender material, dar cursos y armar sus propios productos.
“En ese entonces no sabía utilizar las herramientas para el engarzado, todo era de manera empírica”.
A su regreso a Irapuato, continuó con el negocio, sólo que ahora lo que elaboraba, lo mandaba a Toluca.
Después decidió promover sus productos por catálogo, pero la experiencia no fue buena, pues se sacrificaban la ganancia, la producción y el diseño; además, los tiempos de entrega diezmaban su equipo de trabajo.
También contrató un grupo de vendedoras que no respondieron a la confianza que se les tuvo, ninguna de las dos opciones tuvo la respuesta que esperaba.
“Al inicio lo que quieres es vender, no estás bien enfocado”. Tales experiencias le ayudaron a descubrir su nicho de mercado.
Al asociarse con Nóvica encontró su mercado, pues con este cliente siente libertad de diseño, además de que éste no fija tope de precio para diseñar las piezas.
Proyectos en puerta
Con el negocio en marcha, los planes no terminan para esta empresaria, que tiene como proyecto a corto plazo diseñar una colección con nuevo material importado en Estados Unidos, inexistente en el mercado nacional.
A este proyecto se suma el deseo de montar otro taller y abrir un punto de venta en Irapuato, colaborando con otros creativos de la ciudad.
