La economía holandesa tiene cada vez más presencia en el mercado mexicano. ¿Cuáles son los atractivos de Holanda para los empresarios mexicanos?, se le pregunta a Coenraad Hendrik Adolph Hogewoning, embajador de Países Bajos en México, en charla con El Economista.
Y es que la economía mexicana seguirá diversificándose con base en sus 12 tratados con 44 países, los cuales representan un mercado de 1,200 millones de personas. En este contexto, Países Bajos representa para México una puerta de entrada al mercado europeo, que cuenta con casi 500 millones de consumidores.
Holanda conlleva para las empresas una ventaja competitiva pues ofrece accesos portuarios, logísticos, una democracia estable, sistemas legales transparentes, un clima fiscal favorable para inversionistas, un mercado laboral flexible y una educación muy sólida. Además, se trata de una potencia digital; casi todos los cables que atraviesan el Atlántico llegan a Holanda y ahí se concentra la información digital, pues Amsterdam tiene 33% del mercado mundial de centros de base de datos.
Cada vez más, empresas mexicanas aprovechan esas oportunidades, como América Móvil, la cual compró 29% de las acciones de KPN, compañía holandesa de telefonía, y Mexichem, que compró Wavin, fabricante de tubos de material sintético. Por su parte, México está exportando mucho, especialmente manufacturas, y puede utilizar a Países Bajos para aterrizar en el mercado Europeo.
¿Hay áreas en las que Holanda tiene particular interés?
En nuestro plan de negocios estamos enfocados en los temas del agua, agroindustria y energía.
Estamos interesados en industrias creativas –arquitectura, diseño y arte digital-, en ciencias de la vida y de la salud, infraestructura marítima, logística y agrologística.
En el sector energético, este mes una misión de empresas holandesas visitarán Villahermosa, Ciudad del Carmen y el DF, en correspondencia a una misión de Pemex que fue a Holanda en octubre del año pasado, bajo un acuerdo entre México y Holanda sobre cooperación en energía, petróleo, gas y energía verde. Algunas empresas ya tienen contactos con Pemex y esperamos ayudar para explorar en aguas profundas.
¿Cree usted que las reformas estructurales que se impulsan en México mejorarían la cooperación comercial con Holanda?
México tiene condiciones macro muy buenas, como un presupuesto controlado, baja inflación, un sector bancario fuerte, pero las reformas que se proponen en el Pacto por México son importantes para el crecimiento económico, el empleo y la competitividad.
Generarán nuevas y mayores oportunidades de intercambio, de know-how y de cooperación, de investigación y desarrollo para empresas e instituciones mexicanas y holandesas, además de que se dará más cooperación y reciprocidad entre instituciones académicas.
Cada año van al menos 500 estudiantes mexicanos a Países Bajos a estudiar; son técnicos, estudiantes de ingeniería petrolera, especialistas en el manejo de agua, o músicos, arquitectos y artistas.
¿Cómo ve Holanda la crisis del euro y cuál es su posición frente al rescate de Chipre?
Chipre es un caso excepcional, por el tamaño de su sector financiero, y requirió las medidas que tomaron los bancos y la reestructuración del sector financiero que le seguirá porque no podía sustentar esta crisis por sí mismo. Los problemas han disminuido, pero el manejo de la crisis en Europa es como un maratón: un proceso a largo plazo, y paso a paso se ha logrado un progreso substancial. Se requiere mantener la disciplina presupuestal y los programas macroeconómicos para estimular el crecimiento económico, pero debemos tener políticas presupuestales para crear las bases necesarias para dar confianza y credibilidad.
El grupo euro confía en que la economía chipriota regrese a un camino sustentable; que tenga un crecimiento financiero y una estabilidad económica.
En países como Grecia y Portugal, lo que se hace es tener un acuerdo que incluye un presupuesto financiero conjunto, que sale de organismos como el FMI e incluye reformas para ser más competitivos, crear más empleo, propiciar crecimiento económico y para consolidar el sistema fiscal.
Habrá un costo social fuerte para algunas naciones de Europa.
Pese al impacto global de la crisis, Europa aún es el bloque económico más grande del mundo.
Representa 26% del PIB mundial, es decir, 2.5 veces más que el de China; su balanza comercial es de 1.5 billones de euros al año y en lo que va de este siglo su comercio global se ha duplicado; en general, hay buenas condiciones para la recuperación.
Estamos muy conscientes de eso, por lo que debemos alcanzar el crecimiento económico. Una manera de lograrlo es con la implementación de reformas estructurales y la Unión Europea está llevando a cabo estos cambios.
Tenemos, también, que profundizar el Mercado Único europeo para generar crecimiento en sectores como servicios, Tecnologías de la Información, desarrollo en investigación y otras áreas. Necesitamos más inversiones inteligentes e innovadoras.
Hay cambios en la monarquía en Holanda. ¿Eso afecta la política en Holanda?
Eso da mucha alegría a la población. Por un lado, nos va a hacer falta la Reina Beatrix porque ha sido una Reina ejemplar; pero por otro lado, es una gran ocasión porque viene un nuevo Rey.
Tendremos una celebración en Amsterdam con una gran fiesta donde el color anaranjado predominará.
La monarquía es el símbolo de nuestra unidad; está por sobre los partidos políticos, lo que le da una posición neutral.
En tiempos difíciles, siempre tenemos a esta familia como factor estabilizador, como punto de encuentro, de unidad y solidaridad. Es una tradición que unifica todos los sentimientos positivos de la nación.
