Las aerolíneas estadunidenses American Airlines y U.S. Airways podrían anunciar la próxima semana un acuerdo de fusión, que crearía la mayor empresa de aviación del mundo en términos de tráfico de pasajeros, según medios de prensa.
Durante semanas han circulado versiones de prensa sobre un posible acuerdo, sin embargo, las expectativas aumentaron en los últimos días ante el término de un plazo que permitirá la divulgación de la información financiera relativa a la transacción.
El diario The Arizona Republic, que se publica en Phoenix, sede de U.S. Airways, informó este viernes en su portal de internet que bajo las negociaciones que se llevan a cabo, esa aerolínea sería la que absorberá a American Airlines.
Sin embargo, la sede de la nueva compañía estaría en Fort Worth, Texas, donde se ubica American Airlines.
El presidente y director general de U.S. Airways, Doug Parker, quien encabezó en 2005 la fusión de esta aerolínea con American West, quedaría al frente de la nueva compañía aérea, de acuerdo con The Arizona Republic.
Una fuente cercana a las negociaciones reveló al rotativo que un acuerdo podría ser anunciado la próxima semana, salvo inconvenientes de última hora.
Parker y otros ejecutivos de US Airways han buscado en forma activa un acuerdo con American Airlines, al sostener que una combinación es necesaria para competir mejor con United y Delta.
Si ambas compañías se unen, la nueva empresa superaría a Delta Airlines y a United Airlines, que a su vez crecieron a través de recientes fusiones, la primera con Northwest Airlines y la segunda con Continental.
Analistas de la industria indicaron también a The Arizona Republic que una fusión entre las dos compañías es probable y razonable.
La unión de American con U.S. Airways continuaría con la tradición de fusiones de las aerolíneas en todo el mundo. La más reciente es la de Continental con United Airlines, que dio pie a la creación de la compañía United Continental.
American Airlines creció también tras fusionarse con Trans World Airlines (TWA) en 2001 y con otras tres compañías aéreas en la década de los 80.
Por su parte, American West absorbió a U.S. Airways, pero optó por mantener el nombre de esta última.
