En la última década, el entorno operativo transpacífico ha sido difícil, el comercio total ha producido resultados nada rentables durante nueve de los últimos diez años y ha llevado a algunos a cuestionar su viabilidad a largo plazo.
Como resultado, Maersk Line ha analizado los resultados del comercio desde un enfoque que garantice su posición, según informa un comunicado de la naviera.
En ese sentido, hoy anunció que está reduciendo su capacidad en el suroeste del Pacífico. Al hacerlo, cerrará su actual servicio TP5 a partir del 15 de enero de 2015; y dejará de ofrecer su producto Taiwan Express directo hacia el suroeste del Pacífico a partir del 1 de enero de 2015.
“Esto de ninguna manera sugiere que nuestro compromiso con el comercio transpacífico haya titubeado. De hecho, lo vemos como todo lo contrario. Cuando miramos hacia el futuro, queremos seguir desempeñando un papel crítico en la cadena de suministros de nuestros clientes”, agrega la danesa.
“Sin embargo, la prolongada presión a la baja sobre la rentabilidad en el transpacífico representa un grave riesgo para los niveles de servicio. Nosotros no tomaremos la iniciativa pero nos basaremos en el Acuerdo Transpacífico de Estabilización para afrontar el reto de rentabilidad en beneficio de todas las partes interesadas”, continúa el documento enviado a sus clientes a nivel mundial.
Para asegurar la cobertura necesaria a sus clientes, todas las rutas se sustituirán por opciones alternativas.
Para los clientes que utilizan el actual servicio TP5, los mercados del norte de China y Corea serán cubiertos por una nueva red este-oeste, que se iniciará en enero y proporcionará los productos en el mercado.
Para el mercado japonés, a partir del 16 de enero de 2015, lanzará un nuevo producto TP5 con capacidad reducida cubriendo Busan, Yokohama, Los Ángeles y Oakland
