La vulnerabilidad financiera llegó a niveles preocupantes en México, el Caribe, América del Sur y Brasil, de acuerdo con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) en el documento Horizontes 2030: la igualdad en el centro del desarrollo sostenible”.
De acuerdo con el organismo, los términos en que actualmente se realizan las operaciones comerciales y las variaciones en el ritmo de crecimiento de los principales socios de México lo hacen vulnerable por la dependencia con Estados Unidos.
La Cepal aseveró que la economía mexicana corre riesgo por: “la combinación de remesas, viajes y exportaciones de manufacturas a Estados Unidos lo vuelve vulnerable al ciclo económico de ese país”.
El texto que divulgó el organismo dependiente de la ONU detalló que México y Brasil tienen en común de, que por ser economías integradas al mercado financiero internacional, sufrir una reversión de los flujos globales a corto plazo.
Si se toma como punto de partida la década de 1980 es evidente que “aumentó la vulnerabilidad externa financiera de manera casi generalizada en la región, particularmente en el Caribe”, en esa región los pasivos externos subieron de 34% del PIB a 78% durante esa década.
Los incrementos “son importantes” en América del Sur, de 25% en los 80 subieron a 33% en los últimos años; en Brasil, de 16% aumentó a 25%, y en México, de 19% llegó a 27%. Mientras que en Centroamérica, el alza fue menor y se mantiene en niveles intermedios de 30% a 33%.
Parte del problema es que hay países que tienen una mayor diversificación de las fuentes de divisas, en tanto que otros dependen del comportamiento de la actividad productiva de otros países.
Por ejemplo, en el caso de Guatemala, Honduras, El Salvador y México son ensambladores de bienes industriales de exportación que reciben grandes remesas y dependen del ciclo económico estadounidense.
El organismo que dirige Alicia Bárcena explicó que aunque el endeudamiento externo tradicional y el aumento del acervo de reservas internacionales dan la sensación de menor vulnerabilidad externa, los pasivos actuales externos son mayores a lo vistos en los años 80.
La Cepal pidió cambiar el estilo de desarrollo de los países porque el actual es insostenible.
Hay pérdida de dinamismo y se vive una inestabilidad del sistema económico, desigualdades y tensiones causadas por la concentración de la riqueza, además de un deterioro del ambiente, temas que deben ser objeto de debate, indica el reporte.
