La nueva regulación establece regulaciones diferentes en función del peso que tenga el dron y del uso que se le vaya a dar.
Las aeronaves de uso comercial que tengan un peso superior a 25 kilos deberán ser utilizadas por una persona con licencia para pilotar drones y sólo durante las horas del día. Las aeronaves no tripuladas de tipo pesado que se vayan a usar con fines comerciales deberán registrarse ante la Dirección General Adjunta de Transporte y Control Aeronáutico y obtener la aprobación Tipo RPAS y Autorización de Operación.
Los drones comerciales de tipo micro (hasta 2 kilos de peso) tendrán sus condiciones de vuelo limitadas a una altitud máxima de 122 metros y no podrán ser operadas más allá de la línea de visión del piloto.
Los drones comerciales de tipo ligero (de 2 a 25 kilos) deberán contar con registro y placa de identificación y disponer de Autorización de Operación.
El uso de drones en actividades comerciales es una de las últimas novedades en la logística urbana o de última milla. De hecho, Correos está realizando pruebas en España para valorar la viabilidad de hacer entregas con estos dispositivos.