La Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) de México entregó la obra que duplicará la capacidad del Puerto de Veracruz. El nuevo terminal, finalizada su primera etapa, podrá movilizar hasta 66 millones de toneladas y, al terminar su segunda fase, más de 95 millones.
El puerto actual tiene capacidad de operar 24 millones de toneladas al año, con el nuevo Puerto de Veracruz se cuadruplicará el volumen actual, con lo que será más grande que los puertos de Manzanillo y Lázaro Cárdenas juntos.
La primera etapa contempló la construcción del rompeolas poniente, terminado al 100%, y que alcanza 4 km 245 metros para convertirse en el más largo de Latinoamérica al superar las escolleras de San Antonio en Chile y de Puerto Colón en Panamá.
Se utilizaron más de 8,3 millones de toneladas de roca, equiparadas al movimiento de 400.000 camiones de volteo de 20 toneladas cada uno y se requirieron 26.582 elementos de concreto de 3, 9, 12 y 20 toneladas de peso para la coraza del rompeolas. Luego, concluyó el dragado y la construcción del canal de navegación interno de 2,8 kilómetros con dos dársenas de ciaboga de 600 y 550 metros de diámetro para las maniobras de los buques mercantes de la última generación.
El material productor del dragado ascendió a 14,2 millones de metros cúbicos y se utilizó para rellenar terrenos donde se construyen cinco nuevos terminales, lo que equivale 184 hectáreas al mar. Éstos cinco, se especializan en contenedores, líquidos, granel agrícola, granel mineral y semi especializada en carga general.
El área total del Nuevo Puerto de Veracruz asciende a1.113 hectáreas de las cuales 626 se ubican en tierra y 487 en agua, duplicando la extensión del puerto actual conformado por 554 hectáreas tierra-mar.
En la entrega, estuvieron presentes, entre otros, el director general del Centro SCT Veracruz, Ricardo Ortiz Estrada; los directores de las APIs del país, el director general del Fideicomiso de Formación y Capacitación de la Marina Mercante, el Cap. Enrique Casarrubias García, empresarios navieros y estudiantes de la escuela de la Marina Mercante, Fernando Siliceo y Torres.
