La actividad manufacturera de Estados Unidos creció en febrero a su ritmo más acelerado desde junio de 2011, impulsada por nuevos pedidos y mayor producción.
El tercer mes consecutivo de crecimiento sugiere que las fábricas podrían ayudar a la economía este año después de que sufrieron una desaceleración durante la mayor parte de 2012.
El Instituto de Gerencia de Suministros (ISM, por sus siglas en inglés), un grupo de gerentes de compras, informó el viernes que su índice de actividad manufacturera se incrementó el mes pasado a 54.2, un aumento en comparación con 53.1 en enero. Una lectura por encima de 50 indica crecimiento.
Los nuevos pedidos subieron a su mayor nivel desde abril de 2011. Las fábricas contrataron personal, indicó el informe, pero a un ritmo menor que el mes anterior.
El aumento de la actividad fabril en febrero es alentador porque deja entrever que la demanda de bienes es más fuerte, a pesar de que los consumidores están pagando un mayor impuesto a la Seguridad Social, lo que ha reducido el salario neto que reciben.
La noticia se produce después de otro informe emitido el viernes que mostró que los consumidores redujeron en enero el gasto en bienes manufacturados duraderos, probablemente debido al aumento en los impuestos.
La producción de las fábricas pudiera incrementarse en los próximos meses. En enero, las empresas aumentaron sus pedidos de maquinaria industrial y otros bienes de capital al mayor ritmo en más de un año. Eso deja entrever que tienen confianza en su crecimiento a futuro.
