El presidente de la Cámara, Alfonso Rocha López, afirmó que de los 650 socios registrados en el estado de Guanajuato, al menos 30 son fabricantes de ropa infantil, ubicados en su mayor parte en Moroleón, Uriangato e Irapuato.
A pesar de estas cifras, el presidente reconoció que este sector no es el fuerte del estado: “Falta apostarle al sector infantil, en cuanto a exportaciones se encuentra rezagado porque son pocos los fabricantes, realmente su mercado y su nicho es nacional”.
El 31.3% de la población guanajuatense son niños y, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Gasto en los Hogares del INEGI, el gasto promedio anual por hogar en prendas de vestir y calzado es de 6 mil 545 pesos.
Esta oportunidad de mercado la han detectado marcas mexicanas que trabajan para lanzar productos con diseños y formas novedosas para los niños, quienes se han vuelto más activos en la compra de su ropa.
Este sector que antes se consideraba tradicional ha tenido que transformarse en los últimos años para competir con éxito en innovación y en diseño en el mercado, de hecho son marcas como Moda Payasso Kids, Chiccos y Michelle by Kari quienes concuerdan en que es el diseño uno de los principales rubros que generan valor agregado en esta industria.
Hay gran oportunidad: Canaive
El director de la Cámara Nacional de la Industria del Vestido (Canaive), Fernando de la Vega, aceptó que en el estado de Guanajuato aún no hay fabricante que haga una línea fuerte en el mercado infantil,a pesar de que hay proveedores que se acercan buscando ropa de niño, niña y bebé.
“Guanajuato es un estado en donde se fabrica cualquier tipo de prenda para toda la familia, pero en la moda infantil y juvenil existe mucho auge últimamente y hay mucha oportunidad”.
La Canaive tiene registradas plantas que se dedican a la fabricación de ropa en la zona de Moroleón y Uriangato, algunas han incluido dentro de su producción la ropa infantil.
“Es un nicho que está poco aprovechado, mucha gente no quiere fabricar este tipo de ropa por el costo que representa a veces y los compradores no quieren pagar ese costo, ahora la ropa de niño casi tiene el mismo valor que la ropa de adulto, eso ha hecho que no se despegue la fabricación”.
Fernando de la Vega habló del cambio que ha sufrido la moda infantil que pasó de ser de tejido a jeans y camisetas, y lo que los papás buscan actualmente es que el niño se vista lo más parecido a un joven.
Guanajuato no tiene registrada exportación de ropa infantil.
El director de la Canaive mencionó que los dos rubros importantes para las exportaciones del estado son el de jeans y camiseta. Aceptó que hoy en día es más la ropa infantil que se importa, sin embargo se mostró alentador para que esta situación cambie a través de los candados arancelarios.
“Este año se impondrían precios específicos, ya no pasará subvaluada, por eso hay tanta oportunidad de fabricar, porque ya costaría más trabajo importar esa ropa”.
Chiccos
Revolucionando la moda infantil
Sin un conocimiento del ramo textil, Carlos García y Corina García se aventuraron a crear la marca Chiccos hace 15 años. Hoy participan en distintas ferias de moda del País para impulsar sus modelos.
Corina García recordó que en sus inicios el mercado infantil no era tan competido ya que la moda se enfocaba en las líneas de adulto tanto de dama como caballero, situación que aprovecharon para ir creando opciones únicas.
Los estilos de Chicco son basados en la moda de temporada y con base en las exigencias del mercado van diseñando. Cada semana producen de cinco a seis modelos nuevos, aproximadamente al mes producen 20 modelos para dos líneas: primavera-verano y otoño-invierno.
Carlos García comentó que en el ramo de la fabricación de ropa de niña la exigencia es mayor pues cada vez hay más modelaje y la moda infantil es muy cambiante.
“A las niñas se les compra más por la gran variedad de diseños que se pueden hacer, en niño creo que está estancado o es un poco más básico que la moda de niña. Las niñas de ahora ya no son las de antes que se ponían cualquier cosa que se les adaptaba, ahora ya son exigentes”.
El objetivo principal para Chiccos es tener un mercado amplio de venta, por el momento la distribución se concentra en la zona centro y Bajío del País.
“Visualizamos llegar a más estados de la República, que se consolide la marca y las ventas incrementen para en un futuro llegar a exportar nuestra marca”.
El camino no es fácil, la demanda de telas y diseños es una revolución para los diseñadores, ellos afirmaron que se apegan a la calidad en sus prendas y a la atención al cliente para que la marca se posicione paso a paso.
Moda Payasso for Kids
De adulto a niño
Jorge Guzmán González inició como distribuidor de ropa para dama, caballero y niños en Moroleón. Mientras se iba adentrando al mercado descubrió que los mejores resultados de venta se daban en la ropa infantil; ahí estaba el futuro de Moda Payasso for Kids.
“Fuimos notando que el mercado de niños era mejor negocio porque invertías menos y le ganabas más que lo de dama y caballero, fue lo que nos motivó a fabricar ropa de niños hace 15 años”.
Los diseños y colores de la línea son conservadores pero respetando las tendencias. El director Jorge Guzmán resaltó la importancia de estar actualizado ya que las damas, por lo general, son las que manifiestan apego a la moda.
Hoy en día los niños toman terreno en la toma decisiones al momento de vestirse. La estrategia de Moda Payasso for Kids es enganchar tanto al niño como a la madre, equilibrando el gusto por la ropa entre ambos.
Actualmente manejan dos líneas de temporada, cada una consiste en 20 ó 30 modelos diferentes; la producción en promedio semanal es de 500 a mil 500 prendas, la materia prima la compran en Puebla y la Ciudad de México, aunque en ocasiones se acercan a los fabricantes de tela de Moroleón.
La marca ha logrado presencia en diversos puntos de la República; en palabras de Jorge Guzmán han llegado a puntos como Yucatán y Baja California.
En experiencia del empresario, en el municipio textil cada vez más fabricantes le apuestan a la creación de moda infantil puesto que ven una oportunidad en el mercado, sin embargo en los últimos años la importación de vestimenta a muy bajo precio ha provocado afectaciones dentro de la industria.
“La ropa china no ha dejado de entrar al comercio, y la gente lo consume por su bajo precio sin detenerse a pensar en la calidad del producto, nosotros buscamos formas de defendernos”.
La manera en que han atacado esta problemática es con la calidad de telas. Jorge Guzmán reconoce que el precio nunca podrá ser igualitario al de la ropa de importación pero la calidad le ha ayudado a que sus clientes permanezcan fieles en la compra.
El dueño de Moda Payasso for Kids tiene en mente llevar a la marca a una estabilidad de venta y producción, la idea es conseguir aumentar su cartera de clientes formales y grandes.
Michelle by Kari
Busca grandes cadenas
La marca inició hace 30 años con la fabricación de suéter de dama, posteriormente incluyeron poco a poco la línea infantil esperando la reacción del mercado.
Michelle Zavala, dueña de la marca, tuvo la inquietud de estudiar diseño de modas cuando ya había formado una familia, esta carrera le dejó diversos premios ganados por sus diseños, pero fue la línea infantil con la que se identificó, aunado a que en ventas por cada diez prendas infantiles se vendía una de dama.
“Nosotros hacemos los diseños de las prendas, nos guiamos en tendencias en colorido y descubrimos que la moda infantil es un poco más tranquila que la de dama y por eso decidimos quedarnos únicamente con la línea de niñas”.
Esta marca se apoya de los demás fabricantes de Moroleón para proveerse de materia prima, y ocasionalmente van a la Ciudad de México con la idea de innovar en telas.
Miguel Zavala, propietario también de la marca, platicó que existe una dependencia con los fabricantes de telas porque son ellos quienes marcan la tendencia en colores y estampados.
Mensualmente Michelle by Kari maquila entre mil y 2 mil prendas, dependiendo de las condiciones del mercado y la demanda que tienen de modelos clásicos y modernos.
La ventaja que encuentran los empresarios en el mercado de niños es que estos cada año cambian de talla por su rápido crecimiento, por lo que tienen que consumir más.
Actualmente tienen presencia en el norte del País. Su expansión la han logrado a través de ferias de moda, creando contacto con cadenas como Ley, Del Sol y Grupo Nuevo Mundo. Clientes que les exigen un continuo cambio de modelaje.
“Vienen por ejemplo cadenas como Ley y Del Sol y ellos fijan modelos que quieren sacar en temporada, nos adaptamos a lo que ellos nos pidan, tenemos el equipo de tejido de punto más avanzado para la ropa de invierno”.
La diseñadora espera que el mercado para la marca se extienda sin descartar la posibilidad de entrar al mercado extranjero, a pesar de la competencia que ha generado la importación de ropa.
