La Jolla, California.- Ante los retos energéticos que se presentan en el mundo, es urgente que Petróleos Mexicanos, PEMEX permita la participación privada, sin que se privatice; de lo contrario es muy probable que en 5 años México se convierta en un país netamente importador de crudo, según coincidieron analistas expertos en el tema.
“Los contratos privados que ha lazado Pemex no convencen a nadie, es como poner el pie en agua fría, sin entrarle completamente. Yo creo que debe haber una reforma real al estilo mexicano, sin afectar los intereses nacionales, como lo han hecho otras empresas como Petrobras en Brasil. Yo creo que los mexicanos podrían ver otros modelos del mundo y aprender de ellos para crear su propio modelo”, explicó Jorge Piñon, consultor e investigador del Centro de Energía Internacional y Políticas de Medio Ambiente de la Universidad de Texas en Austin.
Durante su participación en el marco de la XXI Conferencia de Energía del Instituto de las Américas, en donde hizo hincapié en el potencial de Latinoamérica en materia de hidrocarburos convencionales y no convencionales, Piñon explicó que en este contexto el futuro de México es grande y prometedor, pero tiene que poner sobre la mesa un esquema de desarrollo que le permita al sector privado, ser socio del sector público mexicano, sin “tener que romper el juego de la soberanía nacional”.
David Mares, consultor del Instituto James Baker III de políticas públicas de la Universidad Rice explicó que los contratos fueron un paso, pero no son suficientes y que se México no se moderniza y se abre, la estabilización en la producción volverá a caer porque PEMEX no tiene la capacidad, ni la tecnología adecuada, ni los recursos humanos necesarios para hacer todo sola.
“México se quedó en el nacionalismo de los años 30 y ese no es el nacionalismo brasileño, ni el venezolano, boliviano o argentino. PEMEX se tiene que modernizar, no tirar el nacionalismo.
Imagínate Chávez permite que las empresas privadas en Venezuela funcionen y yo no diría que él no es nacionalista. Cristina nacionaliza en Argentina Repsol YPF, pero el 49% de las acciones están en manos fuera del estado y Pemex tiene una porción de esas acciones de YPF. Todo mundo la critica pero no lo nacionalizo en la manera en que Pemex, que fue bueno para esa época”, enfatizó el también profesor de la Universidad de California en San Diego, UCSD.
Ambos conocedores del tema coincidieron en que México necesita producir mucho más porque la economía requiere capital y que no es suficiente pensar que hay más reservas petroleras, si no hay forma de producirlas.
“Yo creo que si México no se moderniza, en los próximos 5 años podría ser un importador neto de crudo, básicamente por la falta de modernización y la producción, no tanto por las reservas”, aseguró Piñon.
Dijo que las reservas están ahí, no solamente en Campeche y Chicontepec, porque “yo estoy seguro que se van a probar en las aguas profundas del Golfo de México. El debate no es sobre las posibles reservas de hidrocarburos en México, sino sobre el proceso que se va a implementar para el desarrollo de esas reservas. México quizá tenga 60, 70 o miles de millones de reservas, pero tenemos que ver que están ahí y luego viene la parte más difícil, porque hay que producirlas”.
“Tienen que permitir que Pemex crezca y se comporte como una verdadera empresa internacional de petróleo y no pueden continuar metiendo la mano en la caja chica de Pemex y sacando dinero y deben dejarla que invierta su capital para el crecimiento de la empresa y por ende del país”, enfatizó el investigador de la Universidad de Texas en Austin.
El mundo de hidrocarburos en la actualidad requiere de grandes capitales, incluso de consorcios, explicó Mares, y Pemex no puede hacerlo solo y si se va a esperar a haga todo, lo va a hacer en fases y tomará mucho tiempo para que reúna todo lo que se requiere para que no pierda más del terrero que ha perdido.
El Profesor de Ciencia Política de la UCSD reconoció que los contratos que hay son buenos para viejos pozos y empresas pequeñas, “pero estamos hablando de llegar al potencial que esperamos que México tenga y se requiere mucho capital. Tienen que ser empresas no solo privadas o públicas, pero gigantescas como Petrobras o los chinos. En el mundo actual estos proyectos son muy grandes para que cualquier empresa sola, son consorcios porque es riesgoso, caro y hay muchos retos operacionales en el camino”.
