Colombia aplica desde marzo de 2013 un sobrearancel presuntamente proteccionista a sus importaciones de textiles y calzados desde la ZLC argumentando que los precios afectan a la industria nacional, lo cual rechaza el Ministerio panameño de Comercio e Industria (MICI).
Después de un año de litigio el gobierno colombiano decretó ayer una ligera reducción de esos impuestos que no satisfizo a los vecinos pues mantiene un arancel de 10 por ciento más un pago extra de cinco dólares por kilogramo bruto cuando el precio sea menor o igual a 10 dólares por kilogramo.
La modificación es irrelevante pues se basa en que a cada par de zapatos importados con precio inferior a siete dólares se le aplicará el arancel de 10 por ciento como hasta ahora más los cinco dólares, y los que pasen de siete pagarán igual porcentaje pero sólo 1,75 por cada par.
En el decreto anterior se aplicaba a todos, sin distinción de precios, un extra de cinco dólares, y esa única diferencia no satisface a Panamá por lo cual continuará con el proceso ante la OMC por considerar que el gobierno colombiano no cumple con los parámetros internacionales.
Nosotros mantenemos el panel en la OMC, dijo el titular del MICI Ricardo Qujano, quien se reunió el 20 de febrero en Cartagena, Colombia, con su homólogo Santiago Rojas y no llegaron a acuerdos.
La ZLC es la más importante del mundo después de Hong Kong y representa 8,0 por ciento del Producto Interno Bruto panameño.
Diana Salazar viceministra del MICI dijo el mes pasado que ya se definió el grupo del panel arbitral que tratará la reclamación en la OMC, el cual está presidido por un uruguayo, y lo integran además un mexicano y un chileno.
