Aunque es necesario que México base su crecimiento en el mercado interno para compensar el menor dinamismo que presenta el sector exportador, es preciso consolidar los avances logrados en materia comercial, señaló la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra).
El organismo considera que se debe insistir en la estrategia comercial con el exterior, ya que hasta el momento ha traído buenos dividendos al país y es un factor clave para el desarrollo.
Las nuevas condiciones del entorno mundial, cuyas principales características son la globalización e interdependencia de los procesos económicos, imponen en la actualidad un trato no parcializado de los aspectos del comercio, servicios e inversión.
La globalización, continúa, abre oportunidades para las actividades industriales, pues los gobiernos y las empresas de otros países, industrializados o economías emergentes, buscan activamente socios y contrapartes para impulsar su crecimiento a partir de nuevas bases y mercados.
“La industrial mexicana reconoce la mayor competencia internacional y la existencia de un mercado ampliado. Nuestro perfil exportador se ha transformado radicalmente. Hemos pasado de la petrolización comercial a la diversificación de las fuentes generadoras de divisas”.
Sin embargo, entre los rasgos más sobresalientes que definen la situación nacional en este campo, se debe señalar la concentración de unas cuantas empresas y productos del esfuerzo exportador nacional, precisa en su publicación semanal “Sinopsis económica”.
Por ello, agrega, en materia comercial es preciso consolidar los avances logrados, pero sobre todo, actuar en beneficio de la ampliación en el número de firmas exportadoras y de los artículos que se comercializan en otros países.
El organismo industrial considera que en este momento la política exterior debe buscar favorecer la incorporación de un mayor número de empresas pequeñas y medianas como exportadores directos e indirectos, y estimular la diversificación de los productos exportados.
Además, apoyar el acceso de las empresas y productos mexicanos a nuevos mercados, hasta el momento limitado por las distancias, como es el caso de los mercados asiáticos, a través de la promoción al comercio exterior.
Asimismo, propiciar que las consejerías comerciales actúen en favor de las exportaciones mexicanas, intensificar la detección de nichos de mercado y promover los productos exportables del país, a través de fuertes campañas en el extranjero y la participación en ferias especializadas.
De igual forma, establecer alianzas entre empresas nacionales y extranjeras y un mayor esfuerzo en materia de infraestructura y de acuerdos con las líneas de transporte marítimo para avanzar en el comercio con los mercados asiáticos.
“De no existir una estrategia duradera sin duda, habrá más perdedores que ganadores en la promoción industrial o, cuando menos, los resultados de esta última serán menos perdurables. Es indispensable señalar que cualquier propuesta que busque revertir el deterioro de la estructura productiva debe basarse en el desarrollo de largo plazo”, añade la Canacintra.
